La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural prevé este año una producción de 28.4 millones de toneladas de maíz, 2.6 por ciento más que el año agrícola 2020. Obtener estos resultados depende de la regularización de lluvias en las zonas productoras, apuntó, y admitió que hay “cierta presión” a la alza en los precios por la cantidad del producto disponible en el país, así como por la influencia de las cotizaciones internacionales.
Consideró que un escenario posible es mantener el nivel de producción actual, que “está lejos de ser una caída de 30 por ciento” como han señalado productores. De maíz blanco, para consumo humano, se prevé un crecimiento de 0.5 por ciento en la producción. De maíz amarillo, el organismo estimó un alza de 11.7 por ciento, con una producción de 3.3 millones de toneladas.