El apoyo a los familiares de las víctimas por el desplome de una trabe en la estación Olivos de la línea 12 del Metro será integral y sin importar si viven o no en la Ciudad de México, expresó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo.

Agregó que en el caso de las personas que fueron hospitalizadas y ya fueron dadas de alta, un equipo de la administración local, que incluye un médico y un sicólogo, realiza visitas a sus domicilios sin importar dónde se ubiquen.

El propósito es determinar el apoyo que requieren y ofrecerles ayuda en cuestiones como evitar que tengan que ir a ventanillas para realizar trámites, tanto en instituciones del gobierno federal como local, e incluso privadas.

“Hay una atención a todas las familias que hayan tenido una persona que falleció en la línea 12, sea que vivan en la ciudad, en el estado de México o en alguna otra entidad. Se les va a atender igual. No vamos a dejar desamparado a nadie”, reiteró.

Lo mismo, agregó, para quienes resultaron lesionados y se encuentran en hospitales, así como los que ya fueron dados de alta. “La idea es acompañarlos, no dejarlos en ningún momento solos”, expresó Sheinbaum Pardo.

“Estamos asumiendo la responsabilidad de lo que ocurrió en la Ciudad de México, es responsabilidad nuestra darle seguimiento, independientemente de si viven en la ciudad o en el estado de México”, manifestó.

Reiteró su llamado a que si alguno de los afectados no ha sido contactado por las autoridades, pueda reportarse a Locatel (55 5658 1111) o a los teléfonos de su oficina 55 5345 8066, 55 5345 8065 y 55 5616 0255 para que reciban la atención que requieren.

Ayer, la Gaceta Oficial de la Ciudad de México publicó una declaratoria sobre el derecho de las víctimas y sus familiares a la reparación del daño de manera oportuna, plena, diferenciada, transformadora, integral y efectiva como consecuencia del incidente en la línea 12.

El documento destaca que la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha determinado que las medidas de compensación a víctimas deben partir de la premisa de que son una medida complementaria de la reparación integral, que consiste en el pago de una cantidad en dinero y/o entrega de bienes o prestación de servicios a las víctimas con recursos del Estado; y que la finalidad de la reparación integral del daño es lograr la redignificación y rehabilitación auténtica de los afectados.

Los datos oficiales señalan que por el accidente en la llamada línea dorada fallecieron 26 personas; hasta ayer 28 usuarios que iban en los vagones siniestrados continuaban hospitalizados, mientras 63 habían sido dados alta. El gobierno no precisó cuántos de los afectados son residentes del estado de México, aunque admitió que “sí hay varias personas”.