En esta fecha “emblemática”, la lucha de miles de madres de víctimas en este país, en especial de personas desaparecidas, fue reconocida por la oficina en México de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

GALERÍA: Marchan madres de desaparecidos para exigir verdad y justicia.

En posicionamientos por separado, ambas instancias expresaron su solidaridad con estas mujeres quienes en su constante batalla por encontrar a sus hijos y otros seres queridos ha contribuido a generar políticas públicas e instituciones que resuelvan esos agravios.

Con motivo del 10 de mayo, Día de la madre en México, Guillermo Fernández-Maldonado, representante en México de la ONU-DH, señaló: “En este día, marcado por la dolorosa ausencia de sus hijos e hijas, recordamos la importancia de garantizar los derechos a la verdad, la justicia y reparación. Hacemos un especial reconocimiento a las madres de las personas desaparecidas, por su lucha diaria no sólo para encontrar a sus seres queridos sino también para impulsar mejores instituciones, legislación y políticas públicas, como el Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense”.

El funcionario internacional reconoció a las madres de los 87 mil desaparecidos reportados en México y comprometió el acompañamiento de la institución a su cargo en la búsqueda de sus hijos, de verdad, justicia y reparación. “La ONU-DH seguirá caminando con ustedes”.

Agregó que esa Oficina también continuará apoyando técnicamente al Estado mexicano en sus esfuerzos para garantizar los derechos de las víctimas de las desapariciones y sus familias.

Recordó que el artículo 24 de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, “nos recuerda que el Estado debe adoptar todas las medidas apropiadas para la búsqueda, localización y liberación de las personas desaparecidas y, en caso de fallecimiento, para la búsqueda, el respeto y la restitución de sus restos”.

De su lado, la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, enfatizó que las madres de desaparecidos y de víctimas de feminicidio “sostienen una lucha heroica y ejemplar, y han hecho de su lucha contra los agravios de que han sido objeto sus hijas e hijos, un ideal de vida que restituye la esperanza en un país libre de violencia y en verdadera paz”.

En un comunicado, la funcionaria dijo que estas mujeres son sido motores de la legalidad e impulsoras de políticas públicas.

“No sólo han tenido que hacer frente a sus obligaciones cotidianas de madres y esposas, y con mucha frecuencia de sostén único de sus hogares, sino que han sido guardianas de la memoria de infamias perpetradas por quienes han violado los derechos humanos y arrebatado la vida de generaciones de mujeres y hombres”.

Agregó que en esta fecha, estas madres cuentan con la CNDH. “No están solas”. “Desde aquí reconocemos su ardua labor, especialmente por los obstáculos y trabas que enfrentan para acceder a la verdad y la justicia, por la falta de procesos expeditos que permitan la localización inmediata de hijas e hijos, así como por la dilación en la obtención de los apoyos económicos a que tienen derecho”.

Subrayó que la CNDH reconoce “el papel histórico y la valentía” de todas aquellas madres de las víctimas que denuncian, que no se conforman, que protestan y alzan la voz para que se respeten las garantías fundamentales de todas las personas.

“Sin su persistencia, la progresividad de la justicia y el derecho en México son inexplicables, y cobran vital importancia en un país que tiene por delante la tarea de instaurar la vigencia de los derechos humanos como una normalidad”.