Bogotá. Representantes de las iglesias cristianas de Colombia manifestaron ayer su apoyo a la institucionalidad, pidieron el levantamiento de bloqueos y rechazaron la violencia policial, tras una reunión con el presidente Iván Duque, al tiempo que continuaron las protestas en varias ciudades del país.
“Expresamos nuestro respaldo a la institucionalidad y pedimos levantar los bloqueos”, declararon los representantes religiosos tras su encuentro con el mandatario.
Esta reunión es parte de la iniciativa del gobierno para dialogar con diferentes sectores y encontrar una salida a la crisis marcada por multitudinarias protestas que se desarrollan en todo el país desde el 28 de abril, día de paro nacional.
Los líderes religiosos rechazaron abusos de los elementos de las fuerzas de seguridad contra manifestantes, pero a la vez agradecieron la labor de los agentes que, aseguraron, garantizan la seguridad de los colombianos.
Duque destacó el respaldo de los líderes religiosos a la institucionalidad y al diálogo, y reiteró su rechazo a la violencia en las protestas.
“Acompañamos el llamado de líderes religiosos al levantamiento de bloqueos, su rechazo a la violencia y a las vías de hecho. También el apoyo que dan a los programas sociales, al pacto por los jóvenes y al diálogo es fundamental y demuestra que juntos saldremos adelante”, tuiteó Duque.
Colombia cumplió ayer 12 días consecutivos de marchas cuyo detonante fue el rechazo a una reforma fiscal planteada por el gobierno, y que fue retirada el pasado día 2.
Las protestas, que han dejado al menos 27 muertos, según el gobierno, y más de 40 de acuerdo con organizaciones civiles, tienen ahora como exigencia el retiro de un proyecto de salud que, acusan los inconformes, favorece a las empresas, así como la demanda de una masiva vacunación contra el Covid-19.
La ciudadanía también requiere una renta básica de por lo menos un salario mínimo mensual durante seis meses para personas en condición de pobreza, vulnerables y afectadas por la crisis. Demandan la condonación de créditos agropecuarios, creación de subsidios para pequeños y medianos productores y un programa de compras públicas para la producción agropecuaria.
Piden también subsidios dirigidos a las medianas y pequeñas empresas, empleo con derechos y una política que defienda la soberanía y la seguridad alimentaria. Rechazan el actual sistema educativo y exigen medidas para facilitar el acceso a la educación superior, incluida la privada.
Por igual, piden la no discriminación de género, diversidad sexual y étnica, al igual que desaprueban las privatizaciones.
El Papa, preocupado por la represión
Horas antes del encuentro entre los líderes religiosos y Duque, el papa Francisco expresó su “preocupación por las manifestaciones reprimidas con violencia en Colombia”, que también han dejado 963 detenidos, 548 desaparecidos y 12 casos de violencia sexual, según ONG.
Bogotá, Medellín y Cali fueron escenario de más movilizaciones, en su mayoría pacíficas, aunque fuertes enfrentamientos se produjeron entre indígenas y hombres armados, con saldo de 12 heridos, que rechazan los bloqueos que han provocado desabasto en la ciudad de Cali, epicentro de las manifestaciones.
En tanto, la Orquesta Filarmónica de Bogotá ofreció un concierto en la Plaza Bolívar en respaldo a las movilizaciones pacíficas.
Por otra parte, el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, reveló la existencia de un proceso para la posible apertura de negociaciones de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que propició incluso una reunión con representantes del grupo celebrada el pasado mes de marzo en La Habana, aunque no hubo avances.
Ese encuentro fue resultado de un largo proceso que comenzó en diciembre de 2019 con una cita con un representante del Vaticano, mediador del proceso, y que también incluyó a la Organización de Naciones Unidas, y a Duque, explicó Ceballos en una entrevista con El Tiempo.
“En esas reuniones, tanto la ONU como el Vaticano trataron siempre de tender puentes, con mi conocimiento y articulación, para poder verificar si el ELN estaría en la voluntad de cumplir con las condiciones de liberar a todos los secuestrados y de cesar las acciones criminales”, que fueron planteadas por el gobierno para la apertura de negociaciones de paz.
Ceballos aseguró que “desafortunadamente el ELN nunca avanzó en una respuesta concreta sobre si está en la voluntad de cumplir con esas condiciones”.