Cancún, QR., El hidrobiólogo Esteban Amaro, director de la Red de Monitoreo de Sargazo de Quintana Roo, prevé que 2021 “va a ser un año muy fuerte. De acuerdo con muchos especialistas, entre ellos los de la Universidad del Sur de Florida, en 2021 podría romper el récord de arribazón del alga de 2018”.
En Cancún se han recolectado este año unas 2 mil 300 toneladas de sargazo, según cifras de la Zona Federal Marítima Terrestre (Zofemat), volumen considerado controlable con los instrumentos y personal del municipio.
El sitio donde más algas se han recogido es en playa Coral. Se actúa de inmediato y todos los días hay brigadas trabajando.
Sin embargo, los expertos han identificado un ciclo que se inició en 2015, cuando arribó la mayor cantidad; luego siguieron dos años con poco sargazo, pero en 2018 se incrementó de nuevo de manera considerable.
En 2019 y 2020 fue poco y parece que en 2021 será muy fuerte, por lo que el fenómeno se estaría repitiendo cada tercer año.
Desafortunadamente, explicó Esteban Amaro, es tanta la cantidad de alga que se espera que nadie está preparado para contenerla. Aunque la Secretaría de Marina ha trabajado en la colocación de barreras y en recorridos en los barcos sargaceros, “no se dará abasto”.
“No hay poder humano que pueda con los miles de toneladas que llegan en un solo día; la costa de Quintana Roo mide más de 800 kilómetros y los barcos que hay son insuficientes para combatir este fenómeno. Tendríamos que tener un número impresionante de kilómetros de barrera, lo que no es ni técnica ni económicamente factible”, advirtió el experto.
Ya han llegado grandes volúmenes de alga al arco de las Antillas Menores, Dominica y Martinica; en Jamaica también se está acumulando y está muy cerca ya de la península de Yucatán. Entre Jamaica y Quintana Roo hay aproximadamente mil 100 kilómetros y el sargazo recorre de 25 a 50 kilómetros al día; por ello se prevé su llegada para finales de mayo o principios de junio en la zona norte, expuso.
La macroalga, recordó, entra por la parte sur, entre Xcalak y Mahahual; las corrientes la hacen subir al norte y conforme se acerca el verano se hace más abundante.
En 2018 hubo en el mar alrededor de 300 mil toneladas y este año podría rebasarse esa cifra; de ese total una fracción llega a las costas, pero entre más algas haya en el mar, más probable es que arribe a los arenales.
El hidrobiólogo llamó a los ciudadanos a integrarse a las brigadas de limpieza, a fin de cuidar las fuentes de trabajo, y que las autoridades dediquen más recursos a la atención de este problema.
“La Red de Monitoreo de Sargazo sigue vigilando todos los días y hace reportes diarios desde Tulum hasta Holbox e informamos en Facebook”, concluyó.