Tokio. Sentado dentro del nuevo Estadio Nacional de Tokio, que costó mil 400 millones de dólares, Sebastian Coe procuró otra vez calmar a los deportistas y la escéptica población de Japón de que los aplazados Juegos Olímpicos no representan un riesgo a la salud cuando sean inaugurados, en menos de 11 semanas.
Miembro del Comité Olímpico Internacional y dos veces campeón olímpico, el británico preside la Federación Internacional de Atletismo, ahora World Athletics, ayer montó un ensayo con 420 competidores, con apenas nue-ve extranjeros.
“Debo reconocer que la visita de nueve atletas para un ensayo es algo muy distinto a los miles de competidores que vendrán a esta ciudad durante los meses de verano”, dijo Coe.
Añadió que entiende el recelo de la población japonesa, reflejado en encuestas que plasman un amplio rechazo a la realización de los Juegos en medio de una pandemia.
El velocista estadunidense Justin Gatlin, quien busca competir en sus cuartos juegos veraniegos, comentó que se sintió tranquilo y ganó la final de los 100 metros con 10.24 segundos.
Situación incómoda
Afuera, la escena fue distinta. Alrededor de un centenar de manifestantes “anti-Juegos” marcharon alrededor del inmueble en el centro de la capital japonesa, desplegando afiches que rezaban frases como: “Los Juegos Olímpicos matan a los pobres” y “Paren a los Juegos”.
La tenista Naomi Osaka, número dos del circuito femenino, admitió que su país vive una situación “incómoda” al tener que organizar unos Juegos Olímpicos en plena pandemia del Covid y que harán “correr riesgos a la gente”.
Previo a su participación en el torneo de Roma, declaró: “Esto debería ser motivo de discusión. Claro que me gustaría que los Juegos se celebren, soy deportista y este es el tipo de cosas que he esperado toda mi vida”.
Osaka, quien ya está inoculada, se mostró favorable a que los deportistas que vayan a Tokio reciban la vacuna. “Habrá mucha gente que va a viajar al país, por lo que deben tomar la decisión más adecuada”, insistió.
Las autoridades de Tokio notificaron ayer mil 32 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas tras rebasar por segundo consecutivo el millar diario de infecciones y vuelve a cifras nunca vistas desde la declaración, el 25 de abril, del recientemente extendido estado de emergencia al 31 de mayo.