Nueva Delhi. Los casos de Covid-19 en India alcanzaron otra sombría marca al registrar más de 412 mil contagios y cerca de 4 mil muertos, mientras la demanda de oxígeno médico se multiplicó por siete y el gobierno negó los reportes de que fue lento al distribuir los suministros llegados desde el extranjero.
La enfermedad se propaga en zonas rurales de India y países vecinos como Sri Lanka, Bangladés y Nepal cerraron sus fronteras por temor a que el virus se propague.
Los 412 mil 262 contagios contabilizados ayer elevaron el conteo oficial indio por encima de los 21 millones de enfermos. El Ministerio de Salud reportó también 3 mil 980 decesos en las pasadas 24 horas, para un total de 230 mil 168. Los expertos creen que los datos oficiales están por debajo de los reales.
Once personas con Covid-19 murieron por un fallo repentino en la presión de oxígeno en un hospital universitario gubernamental en la localidad sureña de Chengalpet, posiblemente por una válvula defectuosa, informó The Times of India. Los responsables del centro expresaron que repararon la tubería la semana pasada, pero el consumo de oxígeno se duplicó desde entonces.
La demanda de oxígeno en hospitales se ha multiplicado por siete desde el mes pasado, señaló un funcionario del gobierno, mientras India trabaja a contrarreloj para instalar grandes plantas de oxígeno y trasladar cisternas criogénicas, botellas y oxígeno líquido. El martes, India creó un puente marítimo para importar cisternas de oxígeno desde Baréin y Kuwait, en el Golfo Pérsico.
La mayoría de los hospitales no están equipados con plantas independientes que generen oxígeno directamente para sus pacientes. Por lo tanto, los hospitales suelen depender del oxígeno líquido, que puede almacenarse en cilindros y moverse en tanques criogénicos, pero en pleno brote de coronavirus, los suministros en zonas muy golpeadas como Nueva Delhi son muy escasos.
El ministro de Salud, Harsh Vardhan, informó que el país tiene suficiente oxígeno líquido, pero tiene limitaciones para moverlo. La mayoría del oxígeno se produce en el este, mientras la demanda ha aumentado en el norte y el oeste.
Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania y varias naciones más están enviando medicamentos, pruebas de detección rápida y oxígeno, además de los materiales necesarios para aumentar la producción nacional de vacunas contra el Covid-19 para aliviar la presión sobre la frágil infraestructura sanitaria.
En tanto, el Instituto Butantan, en Sao Paulo, afirmó que las reiteradas críticas del gobierno brasileño contra China afectan la llegada de insumos para la fabricación de la principal vacuna usada por Brasil, tras declaraciones del presidente el neofascista Jair Bolsonaro. Obviamente esas declaraciones tienen impacto y estamos a merced de esa situación”, afirmó en una rueda de prensa Dimas Covas, director del instituto.
Covas respondía a una pregunta sobre el posible impacto de las declaraciones de Bolsonaro, quien el miércoles insinuó que China fabricó el virus en el marco de una “guerra química y bacteriológica”.
Los retrasos ocurren en momentos en que Brasil registra más de 2 mil 300 muertos por día en promedio semanal y totaliza casi 415 mil decesos, un balance superado sólo por Estados Unidos.
El inmunizante de Moderna tiene una eficacia de 96 por ciento entre la población de 12 a 17 años, según los primeros resultados de ensayos clínicos hechos en Estados Unidos.
La Unión Europea lanzó disposiciones para fomentar el desarrollo de tratamientos para Covid-19, incluidos los síntomas persistentes e incapacitantes llamados “Covid largo”, con miras a autorizar hasta cinco nuevos enfoques efectivos hasta el fin del año.
Esta estrategia contempla el apoyo financiero para la investigación y la flexibilización regulatoria, y debería permitir que se autoricen tres nuevos tratamientos contra el Covid-19 hasta octubre de 2021 y posiblemente dos más para fin de año, según la Comisión Europea.
La pandemia ha dejado 155 millones 469 mil 546 casos confirmados, 3 millones 247 mil 364 fallecimientos y 91 millones 846 mil 364 personas recuperadas en el mundo, según la Universidad Johns Hopkins.