Ciudad de México. La especulación en los mercados financieros y el acaparamiento se añadieron a la sequía para impulsar el precio de los granos básicos como maíz, trigo, soya, arroz y café –de amplio consumo en México– a niveles no vistos en más de ocho años, coincidieron analistas.
Es el caso del maíz blanco, que en el país se utiliza principalmente para la elaboración de tortillas, uno de los alimentos más consumidos por los mexicanos, pues según datos del mercado de valores, el precio de la tonelada se ha disparado 40 por ciento en lo que va del año y 120 por ciento en los pasados 12 meses.
Sin embargo, no es el único caso que ha prendido las alarmas, pues el precio internacional de la soya, que suele transformarse en harina para elaboración de alimento para ganado o en aceite para consumo humano, se ha disparado 35 por ciento desde el cierre del año pasado a la fecha.
En tanto, de acuerdo con datos de mercados internacionales, en lo que va del año el precio del trigo ha aumentado 28 por ciento, el del café 21 por ciento y el del arroz 12 por ciento.
Con excepción del arroz, cuyo máximo nivel en cuanto a precios se alcanzó a mediados del año pasado debido al confinamiento por la crisis sanitaria, el costo internacional de todos los granos básicos mencionados se encuentra en su punto más alto desde 2013.
Carlos Bautista, especialista en comercio internacional de la Universidad La Salle, resaltó que si bien el aumento en el precio de alimentos básicos responde en parte a la sequía que enfrentan muchos países del mundo debido al cambio climático, también es consecuencia de la especulación, la cual ahora pagan los consumidores.
El también catedrático explicó que la especulación parte del temor de que la pandemia “descontrolada” que se vive en India pase a otros países, por lo cual muchos gobiernos han acaparado cantidades desproporcionadas de granos básicos para prepararse ante un eventual confinamiento, lo que al disminuir la oferta ha aumentado los precios.
En el caso concreto del maíz, Homero López, presidente del Consejo Nacional de la Tortilla, aseguró que las grandes empresas productoras de alimento han acaparado gran parte del grano en México, lo que ha provocado escasez y encarecimiento del insumo más importante para la elaboración de tortillas, cuyo precio al consumidor ha aumentado en los últimos meses.
Otro factor que se suma, dijo Bautista, es el alza en los combustibles a nivel internacional, que ha encarecido el transporte de mercancías, en particular por vía marítima.
“Las materias que se mueven de un continente a otro se han visto más afectadas, pues absorben el flete marítimo, el ferroviario y luego el carretero, lo que se refleja en mayores costos de logística”, señaló.
Para el catedrático el caso más grave en México es el del maíz, pues se refleja en la tortilla, alimento básico de la población.
“Si sigue la especulación, más el alza en los precios de gas y electricidad, llegará el punto en que el subsidio del gobierno no sea suficiente y su precio aumente entre 20 y 30 por ciento, ocasionando mayor pobreza alimentaria en el país.”