Las corporaciones que trabajan en torno a la zona donde se desplomó el paso elevado de la línea 12 del Metro, en la Ciudad de México, decidieron ampliar el cerco de protección a fin de resguardar la integridad de personas y el propio personal de rescate ante el riesgo de que caiga un vagón que se mantiene suspendido.
Además, la fiscalía de la Ciudad de México ha difundido una lista de personas que se encuentran internados en el hospital del ISSSTE de Tláhuac.
Únicamente personal de la Marina, del Ejército y de la Guardia Nacional, además de elementos de la policía capitalina son los únicos que se mantienen en los primeros perímetros del lugar de los hechos.
En tanto que rescatistas, reporteros y fotógrafos, funcionarios y otras personas que apoyaban, han sido conducidos a sitios de seguridad aunque se mantienen en el sitio.
Una grúa industrial trabaja en estos momentos para poder sostener el convoy que está por caer, a fin de que los trabajos de búsqueda y rescate de personas, puedan continuar a lo largo de la madrugada.
Pese a los llamados de las autoridades de alejarse del lugar, hay gente que aún se mantiene cerca observando todo el movimiento. Otros tratan de obtener información de sus familiares, quienes posiblemente viajaban en los vagones accidentados.
Se han establecido rutas de salida para las ambulancias, a fin de agilizar el traslado a hospitales que atienden a los heridos en caso de que se encontraran más sobrevivientes. También, elementos de la fiscalía capitalina trabajan para tratar de identificar a las 15 personas que perdieron la vida a causa del percance.
Además, se hizo una inspección a lo largo del perímetro de los cables de luz que podrían ocasionar riesgo.