A pesar de que por la emergencia sanitaria se redujeron en el mundo las misiones de observación internacional, para los próximos comicios el Instituto Nacional Electoral (INE) prevé la participación de cinco bajo un esquema mixto, con presencia física y seguimiento virtual a distancia.
Entre las misiones que se programarán destacan la de la Unión Interamericana de Organismos Electorales, la de la Organización de Estados Americanos, la de Avanzada Internacional Latinoamerica –con ex presidentes de organismos electorales–, así como las de Canadá y Estados Unidos.
De forma paralela, con financiamiento de 20 millones de pesos por parte del INE, hay 63 proyectos de agrupaciones nacionales enfocadas a diversos ámbitos del proceso electoral, con especial énfasis en el seguimiento a la aplicación de acciones afirmativas hacia las mujeres, indígenas, personas con discapacidad y de atención a la violencia política de género.
“Ha habido una evolución en el modelo de observación (nacional e internacional), advierte el coordinador de Asuntos Internacionales del instituto, Manuel Carrillo Poblano, quien recuerda que esta labor surgió en 1994 con la finalidad de vigilar un posible fraude electoral.
Eso se transformó después del año 2000, porque ya no se concentra tanto en la jornada electoral, para verificar aspectos específicos y para 2021 “se ha convertido en una observación muy garantista, es decir, la vigilancia del cumplimiento de los derechos de sectores vulnerables”, aunque también se abarca temas como la fiscalización y la actuación del INE en torno a las candidaturas; “son tiros de mayor precisión”, dijo el funcionario.
Destaca que las misiones internacionales han anunciado que observarán con objetivos específicos. “Hay mucho interés nacional y extranjero por el tamaño de la elección y las condiciones políticas bajo las que se efectúan, es inédito. No recuerdan un contexto político tan adverso hacia la autoridad electoral desde 1994, por eso hay seguimiento al desempeño del INE y ha habido señalamientos de estas misiones y organismos internacionales sobre los asuntos internos del país, pero respaldando la imparcialidad del organismo ante los cuestionamientos que ha recibido”.
Hasta ahora, como resultado de los primeros trabajos de los equipos internacionales, se ha emitido un primer informe preliminar de la Misión de Avanzada, que entre otros aspectos de riesgos en los comicios mexicanos señala “la creciente expansión del crimen organizado en ciertos territorios del país”, hay riesgos de “violencia y potencial influencia de la criminalidad organizada sobre las elecciones”, así como la epidemia del Covid.
En el ámbito de observación nacional se presentaron 80 proyectos, de los cuales el comité de expertos aprobó 63, cuyo financiamiento será administrado por el Instituto Interamericano de Derechos Humanos. Uno de los aspectos más emblemáticos que se verificará en el proceso en curso es la atención a la violencia política de género, su incidencia, la prevención y el seguimiento de las acciones de las autoridades electorales.