Roma. Dos puertos italianos lidiaban este sábado con la llegada de cientos de migrantes, una vez que un buque humanitario se dirigía a un puerto siciliano con 236 personas rescatadas de embarcaciones de traficantes en el Mediterráneo, al tiempo que la guardia costera y la policía italiana trasladaron a otros 532 a una isla pequeña.
El grupo de rescate marítimo SOS Mediterranee informó que un buque a su servicio, Ocean Viking, rescató hace cuatro días a migrantes que viajaban en dos botes inflables. Por instrucción de las autoridades italianas, el Ocean Viking se dirigía a Augusta, Sicilia, con sus pasajeros, que, indicó, incluían a 119 menores no acompañados.
SOS Mediterranee señaló que algunos pasajeros dijeron a los socorristas que pese al oleaje alto, los traficantes en Libia los habían golpeado y obligado a subir a botes inflables no aptos para viajar en el mar.
En la isla sureña italiana de Lampedusa, que se encuentra más cerca del norte de África que de Italia continental, el alcalde Salvatore Martello dijo que los migrantes rescatados de cuatro botes desembarcaron durante la noche en la costa. Fueron llevados a la isla en lanchas de la guardia costera y la policía de aduanas.
Por otra parte, un barco de la Marina italiana rescató a 49 migrantes, reportó la televisión estatal italiana.
En la región central del Mar Mediterráneo aún se encuentra otro bote humanitario, el Sea-Watch 4, con 308 personas a bordo rescatadas en cuatro operaciones cuando iban en embarcaciones de traficantes, indicó Sea-Watch en un comunicado. El primer rescate, de 44 personas, tuvo lugar el jueves, agregó.
Sea-Watch 4 solicitó a Italia y Malta un puerto para desembarcar a los migrantes.