San Cristóbal de las Casas, Chis. La niña María del Carmen Jiménez Ramírez, de seis meses de edad e hija de una de las seis familias que hace más de 20 meses fueron desplazadas del barrio Río Jordán, perteneciente a la colonia Miguel Utrilla Los Chorros, municipio de Chenalhó, murió este 30 de abril, Día del Niño, informó la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal.
En un comunicado dijo que la menor nació en Acteal, donde se encuentran refugiadas las seis familias tzotziles desplazadas, que tenían programado el retorno el pasado 28 de abril, pero que suspendieron debido a la falta de condiciones de seguridad.
“La pequeña María del Carmen se había enfermado hace unas semanas, pero últimamente se había puesto bien; de repente se puso malita, la misma noche del día 28 de abril cuando iban a retornar al barrio Río Jordán”, agregó Las Abejas, a la que pertenecían los 45 indígenas masacrados en Acteal el 22 de diciembre de 1997.
Señaló que “las mujeres, entre ellas su mamá, no podían conciliar su dolor y el llanto cuando supieron que el retorno se había abortado, después de que habían puesto toda su esperanza y alegría que por fin podían regresar a recuperar sus casas y su historia, y toda esa angustia de la mamá de la bebé la ingirió a través de la leche que comía”.
Añadió que “vivir hacinados en un cuartito de madera con piso de tierra y compartir una cocina entre seis familias, la leña húmeda, el humo tupido que se penetra directamente en los pulmones de las mujeres y las niñas y niños, y más la preocupación y la incertidumbre de su mamá de no saber cuándo puede retornar a su casa, hizo que ella se enfermara”.
La agrupación informó que la noche del jueves, “María del Carmen no pudo dormir de llanto; no sabíamos qué tenía; sus papás la llevaron al hospital en San Cristóbal de Las Casas el 30 de abril”, pero “nada ni nadie la pudo salvar”.
Manifestó que “no cabe duda de que la niña María del Carmen muere en el marco de desplazamiento forzado; muere en un México en donde los pueblos originarios son despojados de su territorio, pero sobre todo en un México en donde no se garantizan los derechos y la vida de las niñas y niños”.
Subrayó: “Vuela pequeña María del Carmen; vuela sin parar hasta juntarte con todos y todas las niñas como tú que han sido víctimas del desprecio, de la impunidad y de la guerra de exterminio. Anda, y ve a encontrarte con los 4 bebés sacados del vientre de sus madres en la masacre de Acteal; pidan al corazón del cielo y al corazón de la tierra que se acaben las injusticias, que se acaben los conflictos entre hermanos creados por los partidos políticos y los malos gobiernos”.
Abundó: “Hermanita María del Carmen, desde Acteal, Casa de la Memoria y Esperanza, sube y vuela alto tu dignidad a través de las llamas de las candelas que te hemos encendido alrededor de tu pequeño ataúd, en donde te acompañamos desde la iglesia de la Virgen de la Masacre de Acteal una última noche, noche en la que también la lluvia vino a abrazar tu memoria y tu alma”.
Por separado, la agrupación denominada Solidarios de la Voz del Amate, integrada por indígenas presos en el penal de San Cristóbal, expresaron su “profunda tristeza, coraje y dolor, ante la muerte de nuestra pequeña Mari Carmen Jiménez Ramírez, quien perdió la vida, por causa de las condiciones en que viven las familias desplazadas del barrio Río Jordán”.