Guadalajara, Jal. Reunidos de urgencia ante los hechos violentos ocurridos entre las comunidades wixaritari de San Andrés Cohamiata y Santa Catarina Cuexcomatitlán, autoridades federales, estatales y la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ) instalaron una mesa de trabajo permanente cuyo primer acuerdo fue que Josefina Bravo Rangel, comisionada para el Diálogo de los Pueblos Indígenas por parte del gobierno federal, acuda a esa región del norte del estado.
El martes 27 de abril, la tensión que en meses recientes se ha intensificado entre comuneros de San Andrés Cohamiata y de Santa Catarina detonó en incidentes violentos que incluyeron confrontación entre los indígenas con saldo de varias personas lesionadas -dos de ellas tuvieron que ser enviadas vía aérea al hospital mixto de Huejuquilla donde se les dio luego de alta- y varias más detenidas por autoridades tradicionales (tupiles) de ambas localidades, aunque ya fueron dejadas en libertad.
La presencia de la comisionada Rangel en la región wixárika es para buscar que se efectúe una reunión entre las comunidades involucradas y así entablar un diálogo y llegar a acuerdos permanentes respecto al lugar sagrado Teekata, motivo del conflicto indígena, ante el reclamo territorial de ambas comunidades durante al menos cinco décadas.
En el lugar del conflicto permanece desde el martes y luego de numerosos llamados de parte de la CEDHJ personal de la Guardia Nacional y de la Policía del Estado con el fin de evitar nuevos enfrentamientos.
En la mesa permanente instalada en Palacio de Gobierno, en Guadalajara, se informó que esta disputa territorial está en proceso de resolución en los tribunales agrarios, luego que Teekata es considerado uno los cinco lugares sagrados más importantes del pueblo wixárika.
LA CONFRONTACIÓN
El martes, los indígenas de San Andrés Cohamiata se retiraron sin concretar la realización de ceremonias en Teekata, sitio que está en territorio de Santa Catarina, en el municipio de Mezquitic, Jalisco.
La CEDHJ informó que el punto donde detonó el conflicto fue en la ruta de San Andrés a Teekata, cercano a un arroyo en territorio de Santa Catarina, donde se instaló una valla humana que impidió el paso a los peregrinos.
“Después de un conato en el que hubo empujones y algunas agresiones, los ánimos se serenaron con intervención de personal de la CEDHJ y de otros wixaritari ajenos a las comunidades en conflicto. Ya con presencia de Policía del Estado, se concretó un diálogo que no alcanzó acuerdos para permitir el paso”, agregó la defensoría.
Las autoridades de Santa Catarina planteaban que, previo a cualquier ingreso a Teekata, se llevara a cabo un encuentro con la presencia de autoridades comunales para abordar diversos temas agrarios, específicamente delimitación de territorios.
Por su parte, los wixaritari provenientes de San Andrés señalaron que ellos sólo querían cumplir con la realización de ceremonias en el lugar sagrado que, manifiestan, corresponde a todo el pueblo wixárika, por lo que no se puede restringir su acceso.
A la cabecera comunal de Santa Catarina llegaron además elementos de la Guardia Nacional, quienes se retiraron por la noche, permaneciendo en el lugar elementos de la Policía del Estado.
En Santa Catarina también estuvieron presentes autoridades wixaritari de San Sebastián Teponahuaxtlán y de Tuxpan, comunidades hermanas, quienes acudieron para favorecer el entendimiento.