La segunda ola de la pandemia de Covid-19 provocó la mitad de las muertes maternas en los primeros 3.5 meses de 2021. Fueron 145 decesos, que equivalen a 37 por ciento de los reportados en 2020, cuando 248 mujeres embarazadas perdieron la vida por esta causa. En total, 393 hasta el pasado 17 de abril.
El coronavirus se ubicó el año pasado como la principal causa de que mujeres en periodo de embarazo, parto y puerperio murieran. Representó 26 por ciento de la mortalidad materna, con lo que rebasó a la preeclampsia (enfermedad hipertensiva del embarazo), que históricamente ha ocupado el primer sitio de defunción en este grupo poblacional.
Información de la Secretaría de Salud (Ssa) también indica que a la misma fecha se tienen reportados 18 mil 807 recién nacidos notificados en el Sistema de Vigilancia de Enfermedad Respiratoria (Sisver), de los cuales mil 787 (9.5 por ciento) son positivos a Covid-19.
Con las cifras de decesos, la razón de muerte materna (RMM) que en los ocho años previos a 2020 reportó descensos consecutivos hasta ubicarse en 34.2 fallecimientos por cada 100 mil nacimientos, en 2020 subió a 46.6 y en lo que va de 2021 llegó a 51.7.
El registro semanal de la Ssa de este indicador señala que en 2012 la RMM era 42.1.
Durante el segundo pico de la epidemia en el país, entre diciembre de 2020 y enero de 2021, las estadísticas nuevamente han quedado rebasadas por las defunciones confirmadas por Covid-19 (131) y aquellas donde no se tuvo la evidencia de laboratorio sobre la presencia del virus (14).
Mientras, avanzan las investigaciones en torno a la efectividad de las vacunas contra Covid-19 en las mujeres embarazadas. Hace unos días la revista New England Journal of Medicine publicó los primeros resultados de un trabajo realizado en Estados Unidos sobre la vacuna compuesta de ARN mensajero, como es la fabricada por la alianza entre el laboratorio Pfizer y la Universidad de Oxford. También está la vacuna Moderna que se utiliza de manera amplia en Estados Unidos.
Los expertos de distintas instituciones detectaron que aplicar el biológico a las mujeres embarazadas no representa un riesgo mayor para ellas ni para el producto de la gestación respecto a las mujeres no embarazadas.
Por el contrario, los especialistas encontraron indicios de que la madre vacunada en el tercer trimestre del embarazo transfiere a su hijo anticuerpos contra el virus.
También explican que aunque no son del todo comparables, los resultados de los embarazos en personas vacunadas contra Covid-19 son similares a lo reportado en estudios efectuados antes de la pandemia.
Lo que sí hace diferencia es tener o no el coronavirus durante el embarazo. Aquellas que se contagian tienen un mayor riesgo de enfermedad grave, ingresar a terapia intensiva y requerir oxigenación suplementaria, incluso ventilación mecánica.
En México, desde el inicio de la pandemia y hasta el pasado 18 de abril, la Ssa tenía un registro de 51 mil 114 casos de mujeres con embarazo o puerperio a las que se daba seguimiento por Covid-19. Del total, 15 mil 585 tenían prueba confirmatoria, de las cuales 336 fallecieron. Aparte están los decesos de personas que también murieron con sospecha de haber tenido coronavirus.