Bruselas. La Unión Europea (UE) inició una acción legal contra el laboratorio sueco-británico AstraZeneca, al que acusa de haber incumplido sus compromisos de entregas de vacunas antiCovid, anunció este lunes la Comisión Europea.
"Los términos del contrato no fueron respetados y la empresa no está en posición de aplicar una estrategia confiable para garantizar entregas en tiempo y hora", indicó un portavoz del ejecutivo europeo.
El grupo farmacéutico británico-sueco AstraZeneca consideró que la acción legal iniciada por la Unión Europea debido a los retrasos en la entrega de sus vacunas contra el Covid-19 es "infundada" y aseguró que se defendería "firmemente".
AstraZeneca aseguró "respetado plenamente" su contrato con Bruselas y afirmó que esperaba tener "la oportunidad de resolver esta disputa lo antes posible", según un comunicado.
Esta acción legal fue lanzada el viernes en nombre de la UE y de sus 27 Estados miembros, "de acuerdo en forma unánime" con esta decisión, agregó el vocero comunitario, aunque sin dar detalles sobre el procedimiento.
AstraZeneca entregó en el primer trimestre 30 millones de los 120 millones de dosis acordadas con la UE. En el segundo trimestre, espera entregar 70 millones de los 180 millones previstos inicialmente.
El acuerdo de la UE con AstraZeneca es un contrato de derecho belga, en el que el laboratorio, la Comisión y los países del bloque se comprometen a resolver los posibles litigios "ante la jurisdicción exclusiva de los tribunales establecidos en Bruselas".
"Lo que nos importa en este caso es garantizar la entrega rápida de un número suficiente de dosis a las que tienen derecho los ciudadanos europeos y que se nos prometieron en base al contrato", apuntó el portavoz europeo.
En una eventual demanda civil, que tomaría varios meses, los europeos podrían pedir "la rescisión del contrato por incumplimiento, con daños y perjuicios, o el cumplimiento [de las entregas], algo que es poco probable", estimó la semana pasada el abogado belga Arnaud Jansen, que estudió el contrato.
La mayoría de países de la UE limitaron el uso de la vacuna de AstraZeneca por los rarísimos casos de coágulos sanguíneos que puede provocar. Dinamarca ya no la utiliza.