Ciudad de México. La Ciudad de México se mantendrá en “naranja hacia el amarillo” del semáforo epidemiológico, pero a partir del próximo lunes los corporativos privados reanudarán labores presenciales en oficinas con un aforo de 20 por ciento, al mismo tiempo se retomarán actividades en baños y vapores públicos y se podrán realizar reuniones de negocios y fiestas infantiles al aire libre con no más de 50 personas.
Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno de la capital, afirmó que “aunque hubo una discusión interna” no se colocó a la urbe en amarillo, pues aún hay dos de 10 indicadores de la pandemia –tasa de incidencia y tendencia de síndrome Covid– que no han disminuido como se requiere, según los parámetros fijados por las autoridades de salud federales.
Comentó que si bien puede haber diferencias de interpretación de algunos indicadores no hay ningún conflicto con la Secretaría de Salud federal. “Entonces, ¿qué estamos haciendo? Respetamos totalmente el color anaranjado, pero mostramos públicamente –como siempre lo hacemos todos los días– cómo van bajando todos los indicadores del Covid-19 en la ciudad y eso nos permite ir abriendo actividades”.
Agregó que la capital está en el punto más bajo de hospitalizaciones por coronavirus y de positividad desde hace un año, por lo que incluso la posibilidad de una tercera ola de contagios por las vacaciones de Semana Santa es mínima.
No obstante, advirtió que el hecho de que en la ciudad “vayamos bien no significa que el Covid-19 haya terminado”, por lo que reiteró el llamado a mantener las medidas sanitarias correspondientes.
Por su parte, el director general de Gobierno de la Agencia Digital de Innovación Pública, Eduardo Clark García, señaló que se tienen los registros más bajos en todos los indicadores que se han presentado durante los 13 meses de la emergencia sanitaria, entre ellos el de la ocupación hospitalaria, que llegó a 25 por ciento, con 2 mil 118 personas en alguna unidad médica de la ciudad y el de positividad, que es de 6 por ciento.
Respecto a la apertura de oficinas privadas –con lo que se prevé el regreso de 500 mil empleados–, detalló que todos deberán usar cubrebocas dentro de las instalaciones, se colocarán filtros sanitarios, divisiones físicas, aplicación semanal de pruebas e ingreso controlado, mientras los baños públicos podrán operar a 30 por ciento de su capacidad.
También se elimina la restricción de horarios para cines y gimnasios, mientras el resto de los establecimientos mercantiles permanecen con la operación establecida con anterioridad.
Por otra parte, Sheinbaum anunció que al igual que el programa Ciudad al aire libre, el teletrabajo será permanente una vez que sea superada la pandemia, por lo que ya se preparan adecuaciones a las leyes para hacer obligatorio que al menos 20 por ciento del personal de oficinas públicas y privadas labore a distancia, por lo menos un día a la semana, ante los beneficios que ha traído la medida en la reducción de la movilidad y la emisión de contaminantes.