Con una votación dividida de 2 a 1, la Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, desechó una nueva apelación en contra de las expresiones presidenciales realizadas en su conferencia matutina del 16 de marzo. Al resolver un recurso del PAN, se estimó que las afirmaciones presidenciales contra la oposición para descalificar su pretensión de ganar la mayoría no constituyeron propaganda gubernamental ni promoción personalizada.
En el recurso del PAN objetó que en esa conferencia, el Presidente asumía una postura partidista al señalar que la disputa por la mayoría en la Cámara de Diputados se daba entre quienes pretendían regresar al régimen de privilegios y corrupción, contra la transformación que impulsaba. La magistrada Gabriela Villafuerte fue la única que se pronunció en contra del proyecto que eximió de responsabilidades a López Obrador.
Para Villafuerte, de estas afirmaciones se desprende una postura presidencial que se vincula al partido mayoritario y, en ese sentido, puede considerarse como propaganda indebida del presidente. Asimismo, recordó que las manifestaciones de López Obrador se dieron a una pregunta sobre la aprobación de la ley de hidrocarburos en la que también afirmó que durante su gobierno no se había incrementado el precio de los energéticos lo que supone, dijo, una difusión de logros.
Sin embargo, en el proyecto del magistrado Luis Espindola se consideró que no se encontraron elementos que permitieran identificar las afirmaciones de mandatario como propaganda. En esa conferencia indicó su postura sobre una supuesta declaración de inconstitucionalidad, sin certeza de que se vaya a acontecer, a fin de que se impulse una reforma constitucional en materia energética, por lo que debe considerarse que están amparadas dentro de la libertad de expresión