Ante las descalificaciones presidenciales al desempeño del Instituto Nacional Electoral (INE), el consejero Uuc-kib Espadas Ancona sostuvo que el organismo actúa en ejercicio de su autonomía y si hay decisiones que incomodan al presidente Andrés Manuel López Obrador se han tomado con base en deliberaciones sobre los alcances legales, con las que “no siempre he estado de acuerdo”, pero que en su mayoría han sido validadas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
En entrevista consideró que se requiere una reforma electoral que permita ajustar el marco legal y los procedimientos, pero “esto no puede ser la coartada política para la remoción de los consejeros porque no se les considera afines a una fuerza política”.
Respaldó el diseño de selección de consejeros del instituto desfasado de los tiempos sexenales y de mayorías prefiguradas en el Poder Legislativo.
Incorporado al INE en el último proceso de designación encabezado por la mayoría de Morena en la Cámara de Diputados, el consejero aseveró que la concentración de facultades en el instituto abocadas en sus diversas vertientes de arbitraje electoral (fiscalización, quejas), se basa en un diseño legal que genera fuertes tensiones al INE con los actores políticos. “La factura de esas fricciones se nos transmite a los consejeros porque los recientes casos de Guerrero y Michoacán no han sido los únicos”.
Para Espadas –quien votó en contra de las sanciones más drásticas a los aspirantes a gobernador de Morena en esas entidades– señala: “las declaraciones presidenciales a mí no me preocupan realmente, creo que nos hemos hecho a unas prácticas electorales muy de salón de té a partir de 2007 (…) porque tampoco ya se pueden leer en clave de 1965, cuando la postura presidencial nadie la podría rebatir.
“Hoy México ha cambiado mucho. Si el Presidente hace un comentario, una crítica o incluso una descalificación al INE, no tengo la seguridad de que dañe la imagen del instituto. Seguramente entre cierto sector lo hace, pero probablemente en otros esto signifique una evidencia de que es un órgano autónomo del Estado”, señaló Espadas.
Para Espadas Ancona, el diseño legal del INE es el correcto porque se hace cargo de tareas que anteriormente en los estados estaba muy acotada por el dominio de fuerzas locales, como en el caso de la fiscalización.