París. Persisten serias diferencias entre Estados Unidos e Irán sobre cómo podría reanudarse el cumplimiento del acuerdo nuclear iraní de 2015, a pesar de algunos progresos en las últimas conversaciones indirectas en Viena, dijo este miércoles un funcionario senior estadunidense.
Es probable que las conversaciones requieran varias rondas, su resultado sigue siendo incierto y no están cerca de concluir, dijo el funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos a periodistas en una conferencia telefónica.
Las principales diferencias se refieren a las sanciones que Estados Unidos deberá eliminar y a los pasos que deberá dar Irán para reanudar sus obligaciones de frenar su programa nuclear, dijo el funcionario, que habló bajo condición de anonimato.
"Todavía hay desacuerdos y, en algunos casos, bastante importantes", comentó.
"No estamos cerca de la conclusión de estas negociaciones. El resultado es todavía incierto. Hemos hecho algunos progresos. Las conversaciones han sido profesionales y productivas, pero todavía hay muchas diferencias que hay que superar", explicó.
Previamente, las partes europeas del acuerdo nuclear con Irán dijeron que habían visto avances en las dos primeras rondas de negociaciones indirectas entre Estados Unidos e Irán, pero que todavía había importantes obstáculos que superar.
Irán y las potencias mundiales -Gran Bretaña, China, Francia, Alemania y Rusia- se han reunido en Viena para concretar los pasos que serían necesarios si se quiere reactivar el acuerdo, que fue abandonado por el expresidente estadunidense Donald Trump en 2018.
Las conversaciones se retomarán la próxima semana. Una delegación estadounidense se encuentra en un lugar aparte en Viena, lo que permite a las potencias hacer de puente entre ambas partes porque Irán ha rechazado las conversaciones directas por ahora.
Las cuestiones centrales son qué sanciones estadounidenses impuestas por Trump tendrían que ser eliminadas y qué medidas tendría que tomar Irán para frenar sus posteriores incumplimientos de los límites del pacto a su capacidad de enriquecimiento de uranio.
The Wall Street Journal citó a dos personas familiarizadas con el asunto diciendo que Washington estaba abierto a aliviar las sanciones por terrorismo contra el banco central de Irán, sus compañías nacionales de petróleo y de petroleros y sectores económicos clave, incluyendo el acero y el aluminio