Guadalajara. La segunda manifestación en tres días a las afueras de Casa Jalisco, la residencia oficial del gobernador Enrique Alfaro, se desarrolló este domingo por familiares de desaparecidos, en este caso ahora por los hermanos Santiago y Arturo Aguilera Montiel, de quienes no se supo más desde el pasado 15 de abril cuando fueron a vender un automóvil a Ciudad Granja, en Zapopan.

Alrededor de 200 personas se congregaron sobre la avenida Manuel Acuña frente a la casona para exigir paz y justicia en el estado, y pedir “por favor” al gobernador que los ayude para que las investigaciones y dispositivos de búsqueda sean expeditos de parte de la Fiscalía de Jalisco.

La marcha arrancó de los Arcos de Guadalajara y bajo un intenso sol se dirigió a Casa Jalisco, donde de antemano la seguridad había dispuesto un cerco con vallas metálicas y policías.

Adriana Montiel Prado, madre de Arturo y Santiago, describió a sus hijos como personas muy tranquilas, que no se metían en problemas, muchachos que especialmente “no se merecían esto” al llevar una vida normal y sin problemas con alguien.

El sábado acudió a la Fiscalía en busca de avances de la investigación, pero le dijeron que regresara el lunes porque se atravesaba el fin de semana.

Los hermanos desaparecidos acudieron el pasado 15 de abril a vender una camioneta que habían anunciado a través de internet, pero sólo se supo que se dirigieron a Ciudad Granja y desde entonces ya no se tuvo más noticias de ellos.

Hasta ahora las autoridades sólo han localizado la motocicleta en la que se desplazaba uno de ellos y en la que, aparentemente, iban a regresar a su casa luego de completar la venta. La camioneta no ha sido encontrada.

Justo el día 15 de abril cuando desaparecieron los hermanos Aguilera, en Casa Jalisco hubo otra manifestación en la cual Virginia García, madre de otro desaparecido, comentó que la Fiscalía del Estado tiene desde septiembre del año pasado sin ejercer acción penal -a pesar de contar con órdenes de aprehensión- contra un juez municipal, un comandante y cinco policías de Tecolotlán, quienes a finales de 2018 participaron en la desaparición de dos hombres, entre ellos su hijo Raúl Secundino García.