La serenidad y belleza que el pintor Rafael anheló en sus lienzos para lograr nobles ideales renacentistas se magnifican, absorben y cobran vida en una exposición que fusiona la perfección del arte y el avance de la tecnología: Magister Rafaello, un maravilloso viaje por el Renacimiento italiano.
El Centro Nacional de las Artes (Cenart) recibe nuevamente al público con la exhibición que se inaugura mañana, con el uso de sofisticada digitalización al servicio de la experiencia pictórica. Proyecciones gigantes, videos y aplicaciones para el celular permiten vivir los cuadros pintados hace cinco siglos como si se fuera uno más de los personajes. Dos días antes de la apertura ya se habían agotado las entradas para los fines de semana de abril.
Como cruzar el portal de una ciudad utópica del siglo XV, estar en medio de las conversaciones de Platón y Aristóteles en las escalinatas de la Escuela de Atenas, ser testigo presencial de primera fila del momento en que la virgen María ofrece sus promesas matrimoniales a José, o ingresar a las ricas estancias del Palacio del Vaticano. Así se perciben las obras maestras, la viveza del color y la extraordinaria técnica cinco siglos después de la muerte de su creador.
Las reproducciones digitales llegan a México como el final de una estela para conmemorar el 500 aniversario de Rafael o Rafaello Sanzio (1483-1520), rival de Miguel Ángel. Junto a Sandro Botticelli y Leonardo da Vinci integra el cuarteto de los pintores más grandes del Renacimiento, rico periodo cultural que dio luz de conocimiento a la oscuridad de la Edad Media y que precedió a la era moderna.
Como adelantó ayer La Jornada, la muestra abre sus puertas en la Galería Central del Cenart gracias a la colaboración con el Instituto Italiano de Cultura y la compañía Magister Art. Antes, se exhibió en Austria y Vietnam, “superando los obstáculos de estos tiempos difíciles”.
La empresa trasladó hasta la capital de nuestro país las reproducciones de los tesoros del patrimonio italiano, que crea nuevos lenguajes mediante el uso de medios avanzados.
Selena Russo, jefa de producción de la empresa que realizó la muestra, destacó durante un recorrido en el Cenart la experiencia cognitiva para un público lejano y heterogéneo. “La cultura siempre seguirá en presencia y en vivo, pero en un momento que no es posible, se pueden experimentar nuevas formas y espacios”, ideas que lleva a cabo Magister Art Box, con innovadoras soluciones de diseño que se pueden adaptar a distintos espacios arquitectónicos.
Los lienzos en tamaño monumental hacen el recorrido por la corta, aunque fructífera vida de Rafael, desde su nacimiento en Urbino, en 1483, su cambio a Citta di Castello debido a la orfandad, su etapa de ascenso en Florencia, hasta su muerte en Roma en 1520, a los 37 años de edad.
Su autorretrato es el primer encuentro del visitante, rodeado de muros negros, “parece casi observar y remontar metafóricamente su vida, a través de aquellas ciudades renacentistas italianas que marcaron su camino como hombre y artista”, de acuerdo con el discurso curatorial.
Desfile de aventuras pictóricas
Las miradas estremecidas, los ojos desorbitados de horror, ascensos entre el azul celeste, detallados pliegues de túnicas y alas angelicales capturan las miradas en medio de la oscuridad del amplío salón; separadas por muros con pantallas de gran tamaño, las obras se mueven y amplifican, van desfilando una sobre otra, dejando pétreo al visitante por la decena de segundos que tarda en repetirse la cadena de lienzos.
Al final, aguarda al ingreso a los frescos que plasmó sobre muros y bóvedas en el Palacio del Vaticano, comparado en excepcional belleza con la Capilla Sixtina, que realizó su contemporáneo Miguel Ángel.
Para la experiencia pictórica inmersiva es fundamental descargar una aplicación en el teléfono mediante un código QR en la entrada de la galería o desde la tienda de preferencia, para Android o iPhone. También es importante llevar audífonos, ya que la narrativa por los seis círculos temáticos se da mediante el acompañamiento del celular, con la curaduría de Claudio Strinati y la música de Antonio Fresa, destacado compositor de bandas sonoras. Hay dos versiones para el recorrido, una para niños y otra para adultos. Un comité científico también colaboró para realizar tal exhibición tecnológica.
Además, aunque la entrada es gratuita, el acceso es restringido. Es obligatoria la reservación de entrada a la galería (en el enlace https://forms.gle/EmgFKDM9rvYjxGuo6), como parte de las medidas sanitarias por el Covid-19. Únicamente se permite el acceso de 15 personas, cada 15 minutos, por lo que son unos 420 visitantes los que podrán ingresar por día, de jueves a domingo, de 10 a 17:30 horas. La muestra se clausura el 30 de mayo.