Teherán. El presidente de Irán, Hassan Rouhani, afirmó ayer que la decisión de su gobierno de elevar la producción de enriquecimiento de uranio es una respuesta al “terrorismo nuclear” de Israel, al cual responsabilizó de la explosión en el complejo de Natanz el domingo pasado.
“Al parecer este es un ataque de los sionistas. Si ellos emprenden acciones contra nuestra nación, responderemos”, advirtió el gobernante sin dar más detalles, durante una reunión de gobierno, y dejó claro que la república islámica “responderá” ante conspiraciones externas, de las que culpa por lo regular a Estados Unidos e Israel.
La producción de uranio enriquecido a 60 por ciento debería empezar el sábado en la planta de Natanz, pese a los daños que sufrió el domingo. Las autoridades informaron en un primer momento que un “incidente” había provocado un “fallo eléctrico” en la planta, pero después confirmaron que se trató de una explosión.
El diario New York Times reportó que el Mossad (servicio de inteligencia israelí) participó en el ataque, que se perpetró con la ayuda de una bomba introducida de manera “clandestina”.
Rouhani indicó a su gabinete que las centrifugadoras IR-1 de primera generación afectadas por la explosión serán sustituidas por IR-6, cuya tecnología es más avanzada y enriquecen uranio mucho más rápido. “Responderemos a su maldad”, sentenció.
La república islámica anunció el martes que elevaría el umbral máximo de sus actividades de enriquecimiento de uranio 235 de 20 a 60 por ciento con centrifugadoras IR-6, por lo que acercaría a 90 por ciento, lo necesario para conseguir material nuclear de uso militar.
El mandatario iraní insistió en que se trata de actividades “puramente pacíficas” y que, en función de la transparencia, cuentan con la “supervisión” de la Organización Internacional de Energía Atómica, que ayer recorrió la instalaciones de Natanz para “verificar y vigilar” las tareas nucleares de Irán.
“Lo que han hecho en la planta de Natanz se llama terrorismo nuclear, lo que nosotros hacemos es legal”, aseguró Rouhani mientras siguen las negociaciones en Viena para tratar de salvar el acuerdo nuclear iraní firmado con las potencias occidentales en 2015.
Está programada una reunión este jueves para facilitar la vuelta de Estados Unidos a las negociaciones en Viena después de que el ex presidente Donald Trump se retiró del pacto e impuso sanciones a la república islámica.
La Unión Europea manifestó su preocupación por la decisión de Teherán de aumentar el nivel de enriquecimiento de uranio.