Basado en la obra El estado de sitio, de Albert Camus, la Compañía Nacional de Teatro (CNT) estrenó de manera presencial y virtual el montaje Estar sin sitio, con versión y dirección de Cecilia Ramírez Romo, una puesta en escena en la que se cuestiona qué tan responsable es el ser humano en un momento de crisis.
Se trata de una versión, explicó la creadora escénica, que propone adentrarse en la condición humana, en la forma en que pensamos la vida.
La cuestión a final de cuentas, dice, es qué tan responsable somos hoy los seres humanos de la destrucción del mundo, al que tanto defendemos.
Para Ramírez Romo, en la actualidad las personas tienen acceso a muchísima información; “tanta, que se convierte en desinformación. Hoy es común anteponer siempre nuestras necesidades individuales sobre las colectivas. Lamentablemente no vemos un cambio sustancial al respecto desde hace más de 100 años”.
La obra se inicia cuando la población ve un cometa surcar el cielo y un gobernador dice que no pasa nada, que todos tranquilos, que hay que conservar la calma. Entonces, la gente empieza a reaccionar.
Llegan la peste, un hombre con insignias militares de distintas épocas históricas, y su secretaria, quien representa a la muerte, personajes que buscan imponerse.
Entre los asuntos que cuestiona la obra está “por qué siempre, a lo largo de la historia, se pone todo el sentido del deber, la moral, el honor y el poder en una sola persona”, continúa la también actriz. “Creer que una sola persona tiene la verdad absoluta es lo que ha colocado a la humanidad donde esta”.
La obra toma en cuenta el confinamiento sanitario y la importancia de la presencia/ausencia del otro. La sala Héctor Mendoza, de la CNT, donde se escenifica Estar sin sitio, se encuentra con la mayoría de las butacas vacías, pues sólo a ocho espectadores se les permite entrar. Al mismo tiempo, la pieza se transmite a distancia en la cuenta de YouTube del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y la CNT.
“Hay un doble juego entre la presencia/ausencia del espectador, lo cual tiene que ver con la cuestión de la vigilancia, al considerar que alguien del otro lado de la cámara nos está viendo; es decir, ese público en línea está en el teatro, pero no dentro de la sala de teatro.
“El público que está viendo la obra a través de una pantalla, está viendo no sólo la obra, sino que observa cómo llega el público al teatro, convirtiéndose esos espectadores presenciales en parte del espectáculo.”
El título de Estar sin sitio, concluye la creadora escénica, tiene que ver con la pérdida y la desesperanza, con ese lugar en el mundo que hemos perdido como humanidad.
Funciones miércoles, jueves y viernes a las 20 horas, sábados a las 19 y domingos a las 18 horas. Cupo presencial, ocho personas por día. Es necesario hacer reservación vía correo electrónico en publicos.cnteatro@inba.gob.mx, tanto para las presenciales como para las virtuales y para obtener el enlace de acceso al canal de YouTube. El 2 de mayo concluye la temporada.