París. ¿El Salvator Mundi lo pintó Leonardo da Vinci o no? Después de que un documental francés pusiera en duda su autoría, nuevas investigaciones reafirman que el cuadro más caro de la historia sí fue obra del maestro italiano.
El documental, que será difundido este martes en Francia pero cuyo contenido fue adelantado por medios internacionales, afirma que según el Museo del Louvre se trata de una obra del taller de Da Vinci, con contribución del artista, pero no exclusiva.
Pero varios artículos publicados en los últimos días afirman lo contrario, apoyándose en documentos confidenciales.
La historia arranca cuando Arabia Saudita, propietaria de la obra, pidió al Louvre que examinara el lienzo con miras a un eventual préstamo para la retrospectiva sobre Da Vinci que el museo parisino había previsto entre octubre de 2019 y febrero de 2020.
El Louvre cuenta con el laboratorio C2RMF, líder en su ramo destinado al análisis de obras de arte.
Después de examinar el Salvator Mundi durante tres meses en 2018, “el Louvre y el C2RMF llegaron a la conclusión contraria a la del documental: se trata efectivamente de una obra realizada por Leonardo, y sólo por él”, sostiene el experto Didier Rykner en La Tribune de l’Art, una revista francesa de referencia en la materia.
“Esta información fue comunicada a los sauditas en septiembre de 2019”, añade este periodista y especialista en historia del arte.
En un artículo publicado el lunes, el diario New York Times abundó: “El Louvre certificó que la obra era de Leonardo, pero mantuvo en secreto estas conclusiones tras discutirlas con sus propietarios”.
En paralelo, en un libro coeditado por Hazan y Les Editions du Louvre, el director del museo, Jean-Luc Martinez, y el comisario de la exposición sobre Da Vinci, Vincent Delieuvin, confirmaron la atribución del lienzo al maestro del Renacimiento italiano.
Pero el texto fue retirado al día siguiente de salir a la venta en la librería del museo; según Rykner, después de que Arabia Saudita descartara definitivamente prestar la obra.
El director del documental, Antoine Vitkine, deploró por su parte “no haber podido acceder a este documento –puesto que el Louvre negaba su existencia”–, ni a “las conclusiones del análisis” del cuadro.
No fue hasta ahora, “en el contexto de mediatización de mi documental, que la investigación fue publicada en su totalidad”, asegura.
Rykner señala que Arabia Sau-dita se negó a prestar la obra debido a que el Louvre rechazó sus exigencias.
El príncipe Mohamed bin Salmán quería que Salvator Mundi se expusiera junto a La Gioconda, pero los responsables del museo se negaron debido a los “problemas de seguridad y de afluencia” que supondría colocar juntas dos obras maestras de semejante valor.
Además, si bien el Louvre estimaba que la obra encajaba perfectamente en la retrospectiva, no veía por qué ésta debía ser la más importante, aunque se hubiese vendido en 2017 a un precio récord en el arte (450 millones de dólares).
El documental afirma que el análisis del laboratorio C2RMF concluyó que Da Vinci sólo había contribuido mínimamente en la realización del cuadro.
El Louvre rechaza confirmar o desmentir estas informaciones, recordando la prohibición de pronunciarse sobre la autenticidad de una obra que no expone en su recinto.
“Antoine Vitkine se puso en contacto con el Louvre, pero no quisimos responder a sus preguntas porque la obra no fue prestada durante la retrospectiva”, indicaron fuentes del museo a la Afp.
La obra no ha sido mostrada al público desde su venta y se ignora su paradero. Se rumorea que se encuentra en el yate privado del príncipe saudita.
Salvator Mundi fue comprada en mal estado en 2005 por un marchante de arte neoyorquino, que pagó mil 175 dólares por ella. Fue restaurada y presentada durante una exposición en la National Gallery de Londres en 2011.
Antes de ser adquirida por el príncipe saudita, pasó por las manos de un magnate ruso.