Ciudad de México. De acuerdo con un estudio realizado por la Organización Mujeres en Empleo Informal, Globalizando y Organizando (Wiego por sus siglas en inglés), 91 por ciento de los trabajadores informales en esta capital vieron caer su ingreso de hogar durante la crisis sanitaria.
El estudio agrega que para abril del año pasado el total de los sectores perdieron 61 por ciento de sus ganancias promedio diarias en comparación con las que obtuvieron en febrero de 2020 y para mediados de este año los ingresos de todos los sectores considerados en la muestra seguían sin recuperarse a los niveles de previos a la pandemia.
Según el estudio aplicado en una muestra de 163 trabajadores de ambos sexos no asalariados del hogar, comerciantes en tianguis, trabajadoras voluntarias del servicio público de limpia y personas trabajadoras no asalariadas, 24 por ciento reportaron haber pasado hambre pero 15 por ciento del total mencionó haber recibido algún tipo de ayuda alimentaria por parte del gobierno en respuesta a la crisis de Covid-19.
Al dar a conocer los resultados del estudio, Tania Espinoza Sánchez, coordinadora para la Ciudad de México de Wiego, dijo que para lidiar con la crisis 59 por ciento de los encuestados disminuyeron y utilizaron sus ahorros.
La muestra busca estudiar tres periodos, comenzado por febrero de 2020 previa a la crisis sanitaria; en abril durante el momento en el que las restricciones estaban en su punto más álgido y junio, julio y agosto de 2021, para completar la muestra de 163 encuestados vía telefónica se consideraron entrevistas a seis representantes de organizaciones de trabajadores en empleo informal, apuntó.
Durante la pandemia nadie habló “del trabajador no asalariado y los compañeros tuvieron que trabajar vendiendo dulces, chicles, café, tortas o trabajar en la albañilería para poder sacar algo y llevar el sustento a sus familias, ya que el apoyo que nos dio el gobierno fue muy raquítico, mil 500 pesos en dos meses lo que no alcanzó para poder subsistir en los más de 12 meses que lleva la pandemia y poder subsistir y llevar un sustento a nuestras familias”, comentó, Víctor Miguel Pérez Serrano, integrante de la Unión de Aseadores de Calzado.
“Algunos compañeros decían para que voy si gasto más en el pasaje que para llevar para comer a la familia y es cierto nos pegó la pandemia enorme; es muy triste comentarles que ni el gobierno federal nos dio el apoyo ni se preocupó por los no asalariados ya que nosotros solo tenemos el ingreso por la prestación de nuestros servicios de aseo de calzado, así como en las ceremonias religiosas de fotógrafos, o de cualquier tipo de evento, como norteños, trovadores, revisteros, organilleros”, explicó.
José Arturo Granados Frías, secretario General de la Unión de Comerciantes y Tianguistas de la Ciudad de México, dijo que la pandemia agudizó la deuda histórica con los trabajadores no asalariados.