Los Ángeles. La policía de Huntington Beach, California, declaró ayer ilegal una asamblea que se celebraba alrededor del famoso muelle de la ciudad cuando aumentaron las tensiones entre manifestantes que se enfrentaron con partidarios del ex presidente Donald Trump y otros que mostraban lealtad a los grupos supremacistas blancos, informó el diario Los Angeles Times.
Varios cientos de personas se reunieron en el área de la plaza para protestar contra el mitin llamado White Lives Matter (Las vidas blancas importan), en alusión al movimiento Black Lives Matter, el más importante en Estados Unidos en décadas.
Policías se colocaron a las orillas de la plaza mientras helicópteros y drones sobrevolaron la zona.
Alrededor de las 14:30 horas (local), la policía declaró ilegal la reunión y ordenó a la gente que se dispersara cuando la tensión entre manifestantes y contra manifestantes se caldeaba.
Las protestas comenzaron a las 11 de la mañana con la reunión pacífica de los primeros grupos de personas que acudirían a la manifestación de los supremacistas blancos. Pero la multitud fue creciendo, las confrontaciones entre individuos, partidarios del supremacismo blanco y de Trump y manifestantes contrarios estallaron a lo largo de Main Street y de la Pacific Coast Highway. Algunos intercambiaron puñetazos reales e insultos a centímetros de distancia, añadió Los Angeles Times.
Quienes almorzaban en el segundo piso del Cafe Mexicano y Cantina Fred, ubicada en la esquina de Main Street y la Pacific Coast Highway, pudieron observar cómo crecía el caos en la calle.
De un lado, los contramanifestantes coreaban “¡Nazis, váyanse a casa!”, y del otro un grupo agitaba banderas a favor de Trump.
Las riñas obligaron a Tory Johnson, fundador del grupo local Black Lives Matter en Huntington Beach, a finalizar la contraprotesta para aclarar que no estaban ahí para incitar a un alboroto ni para fomentar el caos, sino para reclamar el espacio en el muelle. “Ningunos nazis van a ser el reflejo de lo que es Huntington Beach hoy”, afirmó.
Alrededor del mediodía la situación alcanzó un punto en el que un hombre de barba con un puro se acercó a la plaza frente al muelle y repitió: “las vidas de los blancos importan” muchas veces antes de gritarle a un contramanifestante que sostenía un póster con la leyenda: “Muerte a los del (Ku Klux) Klan”.
Las autoridades no saben quién organizó la manifestación de White Lives Matter, pero fue convocado través de medios sociales como Telegram y algunos vecinos de Huntington aseguran haber recibido volantes del Ku Klux Klan, lo que alertó a algunos contramanifestantes a participar.
Aunque desangeladas y con escasa participación, también hubo protestas y contraprotestas en Seattle, Columbia, Nueva York y Fort Worth.
Por otra parte, Trump arremetió la noche del sábado contra el líder de la minoría en el Senado, Mitch McConnell, tildándolo de “perdedor inútil” y burlándose de su esposa, Elaine Chao, quien fue la secretaria de Transporte del magnate, reportó la agencia de noticias Ap.
Señaló que estaba “decepcionado” de su ex vicepresidente Mike Pence y utilizó una grosería para referirse a McConnell, de acuerdo con asistentes a un acto de donantes del Comité Nacional Republicano.