Chilpancingo. Javier Hernández Peñaloza, secretario ejidal de Guajes de Ayala, municipio de Coyuca de Catalán, en Tierra Caliente de Guerrero, denunció que hasta el sábado pasado de los 32 pueblos que conforman el ejido, en 27 de ellos la totalidad de sus habitantes tuvieron que huir por la violencia que se presenta en esa región.
Entrevistado este lunes por la mañana vía telefónica por Radio Universidad, demandó a los gobiernos estatal y federal, que intervengan debido a que la población ya no cuenta con los alimentos básicos para alimentarse, siendo los niños los más perjudicados.
Nuevamente reiteró su demanda a la Organización de las Naciones Unidas, para que se implemente un programa de ayuda humanitaria, y principalmente para que se lleven alimentos a los habitantes del ejido, debido qué se acabaron los alimentos básicos, “es total el desabasto”, agregó
Mencionó que los únicos pueblos en donde todavía quedan algunas familias son: Guajes de Ayala, El Pescado, El Saibal, Los Órganos y Selva María.
El dirigente campesino manifestó que desde hace mes y medio no han podido trasladarse a Coyuca de Catalán a surtir la despensa básica, porque temen por su seguridad, pero ahora “ya no hay aceite, azúcar y sal que se usan para cocinar alimentos”.
Lamentó que ninguno de los tres niveles de gobierno los atiende, “por eso estamos demandando la ayuda directa de la ONU; afortunadamente todavía conservamos el maíz que cosechamos el año pasado, que nos ha permitido alimentar a nuestras familias”.
Hernández Peñaloza, dijo estar preocupado porque en los últimos días los elementos de la Guardia Nacional que llegaron a El Pescado, solo vigilan a las comunidades desplazadas, “y dejan solas a las otras comunidades, y se pone en riesgo a las familias. Por ello, demandamos la presencia permanente de la Guardia Nacional”.
Eso obliga a que “nosotros tenemos que hacer rondines de vigilancia todo el día en los 5 de los 32 pueblos en donde todavía hay familias que viven con el temor de que en cualquier momento sean atacados por el grupo delictivo”.
Demandó al gobernador Héctor Astudillo Flores, y al presidente Andrés Manuel López Obrador “que asuman su papel y respondan a nuestras peticiones o de lo contrario serán responsables de lo que le pueda suceder a nuestras familias”.
Acusó que el actual alcalde perredista Eusebio Echeverría Tabares no haya visitado el ejido “solo da vergüenza porque nunca ha visitado la zona, está más preocupado por buscar su reelección”.