El recrudecimiento de la pandemia de Covid-19 durante enero y febrero provocó que la economía se contrajera durante el primer trimestre del año, destacó el Banco de México (BdeM).

Según la minuta de la más reciente reunión de la junta de gobierno del banco central, todos sus integrantes resaltaron que la actividad económica nacional se desaceleró.

La mayoría señaló que la desaceleración se debió al recrudecimiento de la pandemia, a las nuevas restricciones a la movilidad, así como a la interrupción en el suministro de algunos insumos.

El documento que refleja la decisión de política monetaria del pasado 25 de marzo en el que la tasa de interés quedó sin movimiento en 4 por ciento, destacó que algunos indicadores oportunos apuntan a una contracción durante el primer trimestre de 2021.

Un integrante de la junta detalló que el Indicador Oportuno de Actividad Económica sugiere una variación anual de menos 4 por ciento del Indicador Global de Actividad Económica en febrero. Otro externó que la recuperación económica se mantiene en una situación crítica.

Por el lado de la demanda, la mayoría coincidió en que la recuperación ha estado impulsada principalmente por el sector externo. Uno destacó que las exportaciones manufactureras rebasaron en enero los niveles anteriores a la pandemia.

Al respecto, el mismo integrante resaltó que se prevé que la demanda externa siga contribuyendo significativamente a la recuperación económica en México.

La mayoría de los miembros de la junta de gobierno comentó que la inversión y el consumo siguen mostrando atonía.

Respecto a la decisión de dejar sin movimiento la tasa de interés de referencia, señalaron que esta pausa en el ciclo de relajamiento no significa que este haya terminado, y que más adelante estarán atentos por si se presentan las condiciones necesarias para continuarlo.

Destacaron que las alzas en la expectativa de crecimiento económico de este año se deben al impulso del sector externo y al proceso de vacunación; uno de ellos señaló que este año la economía mexicana podría crecer hasta 5 por ciento.

Según la minuta, uno de los miembros destacó que los mayores riesgos para la economía son más contagios o retrasos en el programa de vacunación contra el Covid-19, afectaciones en el suministro de insumos para la producción, volatilidad en los mercados financieros y un deterioro en la calidad de la cartera crediticia.

Respecto de la inflación, la junta de gobierno del BdeM prevé un aumento de precios general del país en los próximos meses, sobre todo debido al alza en los energéticos como efecto de la reactivación económica global.