El efecto económico de la pandemia no tocó a los estratos de más alto ingreso, pero sí a las clases medias y bajas, sostuvieron especialistas al comentar el disparo en la fortuna personal de 13 multimillonarios mexicanos.

Mientras las 13 familias más acaudaladas de México sumaron 35 mil millones de dólares a sus fortunas en el último año, según Forbes, entre 9 y 13 millones de mexicanos se sumaron a las filas de la pobreza como consecuencia de la crisis económica que provocó la pandemia de Covid-19

Según estimaciones del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), en el último año 13 millones de personas con ingresos medios y altos cayeron al grupo de menores ingresos; en tanto, el Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED), señaló que en dos años el número de personas en pobreza aumentó en 9 millones.

Rodolfo de la Torre, especialista en desarrollo social del CEEY, destacó que el paso de la pandemia no generó afectaciones en las personas de más altos ingresos; sin embargo, sí tuvo consecuencias en la clase media, pues mientras antes ganaban lo suficiente para vivir cómodamente, ahora han pasado a la pobreza.

Dicho escenario contrasta con la situación de las familias más ricas del país incluidas en la revista Forbes, encabezadas por la de Carlos Slim, cuya fortuna pasó en el último año de 101 mil millones a 136 mil millones de dólares, un incremento de 35 por ciento.

En concreto, Carlos Slim destacó como la personas más acaudalada del país y la 16 del mundo con 62 mil 800 millones de dólares, 20 por ciento más que hace un año; seguido por Germán Larrea, con 25 mil 900 millones tras un repunte de 135 por ciento, y Ricardo Salinas Pliego, con 16 mil 900, con un aumento de 10 por ciento.

El incremento de sus fortunas fue consecuencia del crecimiento que tuvieron sus respectivas empresas con la pandemia, por ejemplo; el negocio de telefonía e Internet de Slim con América Móvil, o el encarecimiento de los metales preciosos como el oro y la plata que benefició a mineras como Grupo México, de Larrea.

Por otro lado, Ricardo Salinas Pliego fue polémico por negarse a cerrar las tiendas Elektra durante el confinamiento, al argumentar que estaban incluidas en los sectores esenciales para el país, dado que al interior se ofrecen servicios financieros.

En un estudio reciente denominado La pandemia y la pobreza en México en 2020, sus autores Héctor Nájera y Curtis Huffman, investigadores de la UNAM, destacaron que durante los primeros meses de la pandemia se sumó la mayor cantidad de nuevos pobres.

Desde su punto de vista, la crisis por las medidas de confinamiento no sólo aumentó la pobreza, sino que la profundizó: “Los pobres ahora son más pobres que en 2018”, señalaron.

De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, durante el cuarto trimestre del año pasado, 40.7 por ciento de la población, es decir, cuatro de cada 10, no podía acceder a la canasta mínima de alimentos mediante su ingreso laboral, cuando en el mismo periodo de 2019 esta cifra fue de 37.3 por ciento.