Ciudad de México. El acto protocolario que dio inicio a la impresión de boletas que se utilizarán en la elección de diputados federales se convirtió en escenario para fijar posturas frente al proceso. La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, advirtió: “siendo la neutralidad una obligación de los gobernantes, también lo es de las autoridades electorales administrativas y judiciales”. Más adelante rubricó: “la premisa es muy clara, el árbitro debe ser neutral o no es árbitro”.
En la sede de Talleres Gráficos de México, el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, también planteó su postura ante la responsable de la política interior.
“El INE es un órgano constitucional autónomo, muy celoso de su independencia y autonomía, pero también tenemos claro que autonomía no significa autarquía. Por eso mantenemos la colaboración con todas las instituciones del Estado mexicano”, sostuvo.
No sólo es el organizador de los comicios, sino también “es el árbitro de la contienda y, aunque haya quienes confundan la aplicación de la ley con sesgos o actitudes parciales, lo cierto es que el árbitro seguirá aplicando las leyes y garantizando la equidad y la imparcialidad en el proceso electoral que, desde el pasado domingo, ha entrado en la fase crucial de las campañas proselitistas. Haremos valer la Constitución, las leyes electorales y las normas”.
Tras informar que se elaborarán 101.6 millones de boletas y 330 mil documentos electorales, destacó que forma parte de la cadena de confianza. Afirmó que la sofisticación del sistema electoral mexicano tiene reconocimiento mundial. “Hoy en México no tiene sentido, desde hace varios años, hablar de fraude electoral y de prácticas que formaron parte de una lamentable picaresca política, afortunadamente superada, como el ratón loco, padrones rasurados, muertos que votan, urnas embarazadas”.
Sánchez Cordero recordó que con la firma del Acuerdo Nacional por la Democracia, los gobiernos federal y estatales asumieron el compromiso de no usar recursos públicos para incidir en los comicios. “Es una obligación de neutralidad ante partidos y candidatos que como secretaria de Gobernación hoy refrendo. Así como la neutralidad no es indiferencia y lo acaba de decir el consejero presidente, la autonomía no es autarquía”.
La titular de Gobernación ofreció el respaldo al INE, institutos locales y tribunales electorales, y parafraseó al ex presidente del desaparecido IFE, José Woldenberg, “lo cito de memoria: que el árbitro no busque el aplauso público, sino el cumplimiento de las reglas del juego”. La democracia “no es sólo elecciones, pero en ellas tiene su fundamento”.
Más tarde, en un mensaje en redes sociales, Córdova añadió: “El día de hoy se ha dicho que el árbitro debe ser discreto y neutral. ¡Coincido totalmente! Pero hay que agregar: eso no significa ser omiso e indiferente frente a las violaciones a la ley, sino todo lo contrario”.