El Consejo Indígena de Nahuatzen, Michoacán, instaló un plantón frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en demanda de que ésta falle en favor de dos de sus compañeros, sentenciados por sabotaje, en un proceso que, aseguran, estuvo viciado de origen. José Luis Jiménez y José Antonio Arreola fueron sentenciados a siete años de prisión y su recurso de reclamación será discutido este miércoles en la primera sala del máximo tribunal. Efraín Avilés, vocero del consejo, afirmó que las acusaciones son infundadas y en realidad se trata de una ofensiva contra la lucha de su comunidad, la cual ya ganó en 2017 un proceso ante el Tribunal Estatal Electoral de Michoacán, que reconoció su derecho a la autodeterminación; sin embargo, sostuvo, ni el gobierno municipal ni el estatal han respetado esta resolución. Explicó que Jiménez y Arreola, miembros del consejo, fueron detenidos en noviembre de 2018 acusados del robo de un vehículo, pero como no hubo pruebas, terminaron sentenciándolos por sabotaje y permanecen desde entonces en el Centro de Readaptación Social Noé Galván Carrillo.