Ciudad de México. Familiares de Carlos Marqués Oyorzábal, defensor de los bosques y comisario del poblado de Las Conchitas, municipio de San Miguel Totolapan, Guerrero, ejecutado y descuartizado sábado pasado, demandaron la intervención del gobierno debido a que han recibido amenazas de muerte de uno de los grupos delincuenciales que operan en esta zona de la Tierra Caliente de Guerrero.
En una grabación emitida por redes sociales y dos videos, la hermana del comisario asesinado expresó: “Nos encontramos aquí en el poblado de Las Conchitas, y necesitamos apoyo, seguridad lo más pronto que se pueda porque ya nos torturaron muy feo”.
Entre sollozos, añadió: “Primero empezaron con mi hermano, ahora dicen que van a acabar con nosotros, con toda la familia, con los niños, que nos van a quemar. Queremos que (las autoridades) se muevan rápido, porque esto urge”.
Relató: “Cuando a mi hermano lo estaban torturando, nosotros hablábamos y pedíamos apoyo (a la policía), pero nadie nos hizo caso”.
El campesino también era parte de la policía comunitaria que formaron los Pueblos Unidos y que han apoyado la detención de camiones que saquean madera del ejido.
En otra grabación, un sobrino del defensor de los bosques expuso: “Ya no quiero que siga pasando esto. A mi tío lo mataron y no quiero que pase eso. Dicen que nos van a venir a matar y a descuartizar como le hicieron a mi tío”.
La hija de Carlos Marqués manifestó: “Mataron a mi papá. Ya no quiero que sigan matando, queremos que nos apoyen a todos. Aquí estamos encerrados en una casa de Las Conchitas”.
En un video, una mujer añadió: “Necesitamos apoyo lo más pronto que se pueda, estamos aquí inseguros, en una casa de adobe, ya no tenemos salida, nos sentimos atrapados. Ya no tenemos fuerzas para caminar, ya no podemos resistir más. Nos van a venir a matar, ya nos dijeron”.
La violencia en las regiones de la Tierra Caliente y la costa Grande de Guerrero ha provocado, según datos oficiales, el desplazamiento de más de 10 mil personas.
Denuncian tala ilegal en Hidalgo
Defensores del bosque de Acaxochitlán, Hidalgo, interpusieron cuatro denuncias ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) contra propietarios y administradores de aserraderos que operan en la comunidad de Zacacautla por tala ilegal y devastación del suelo. Los negocios cuentan con permisos oficiales.
Según las denuncias ante el delegado de la Profepa en Hidalgo, Sergio Islas López, los aserraderos reciben grandes cantidades de madera proveniente de la tala ilegal en el bosque de Zacacuautla, el cual ha sido devastado en los últimos 20 años por taladores al servicio de la familia Canales Templos.
El pasado 25 de marzo, Jesús Arturo Gómez Moedano, Illiria Ninelth Gómez Martín, Jesús Alfredo Fuentes Palma y Andrea Islas Lira, cercanos a la agrupación Kuautlali, AC de Zacacuautla, interpusieron denuncias contra los dueños de aserraderos, que cuentan con permisos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Uno de los cuatro aserraderos está a cargo de Arturo Mejía Carvajal y se ubica en los límites de Zacacuautla con El Lindero. En ese mismo paraje hay otro administrado por Delfino Mejía López. Los otros dos operan en el Barrio del Tecorral y sus responsables son Raúl Villegas Vargas y Martín Santos.