Londres. Miles de manifestantes se unieron a actos en varias ciudades del Reino Unido el sábado, en el marco de un "fin de semana de acción nacional" contra un proyecto de ley que daría a la policía más poderes para frenar las protestas.
El proyecto de ley sobre Policía, Delincuencia, Sentencias y Tribunales pretende endurecer las medidas que los agentes pueden adoptar para dispersar manifestaciones, como la imposición de límites de tiempo y ruido, que los activistas temen que se usen para frenar la disidencia.
El sábado se celebraron marchas de "kill the bill" (maten la ley) en docenas de ciudades, entre ellas Londres, Manchester y Bristol, con el apoyo de grandes grupos de activistas como Extinction Rebellion, defensores del cambio climático, y el movimiento Black Lives Matter.
"(Estoy aquí) para defender los derechos de la libertad de expresión, y los derechos de las organizaciones en nuestra sociedad", dijo Jeremy Corbyn, el exlíder del Partido Laborista de la oposición que se encontraba entre los varios miles de personas que se unieron a la protesta en el centro de Londres.
"Estas manifestaciones, 50 de ellas hoy, marcarán la diferencia", dijo a Reuters frente a las Cámaras del Parlamento.
Desde que el proyecto de ley se presentó en el Parlamento el mes pasado, han habido protestas esporádicas. En Bristol, al suroeste de Inglaterra, las manifestaciones han sido violentas, con agentes y una comisaría atacados con ladrillos y botellas de vidrio, y con vehículos policiales incendiados.
El primer ministro Boris Johnson criticó lo que calificó de "ataques vergonzosos" a los agentes, pero los manifestantes han acusado a la policía de utilizar tácticas de extrema dureza.
Los días de protestas de Extinction Rebellion, que paralizaron partes de Londres a principios de 2019, impulsaron los llamamientos de algunos políticos para que la policía reciba atribuciones para evitar una perturbación excesiva.