El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que la próxima semana acudirá para aplicarse la vacuna contra Covid-19 a donde le corresponda, pero no informará de cuál es el punto de vacunación al que asistirá “porque no quiero que se haga un espectáculo, nada más voy a ir a donde corresponde”.
Al contar ya con una identificación oficial en la que su residencia actual es en Palacio Nacional, el mandatario deberá acudir a algunos de los puntos definidos en la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México.
El lunes pasado indicó que aún no definía cuándo acudiría a recibir el antígeno ya que por indicaciones de sus médicos debía hacerse un estudio previo para constatar la cantidad de anticuerpos que tiene tras contagiarse de Covid-19 en enero pasado. Este miércoles, en su conferencia en Palacio Nacional, señaló que ya se realizó dicho estudio. “No hay problema, tengo anticuerpos pero me voy a vacunar”.
Además, indicó que a polémica desatada por las estimaciones de fallecimientos relacionados con Covid-19 está vinculada también con la posición de opositores y medios de comunicación que los respaldan, y defendió que el gobierno federal no ha ocultado nada relativo a la pandemia.
“Lo de las cifras ha provocado alguna polémica, hasta el expresidente Calderón salió a exponer que era mucho más el número de fallecidos que lo que aquí se informa. Retomó al Washington Post, haciéndolo muy grande. La verdad es que nosotros no ocultamos nada”, indicó al ser cuestionado sobre las cifras de estimaciones de muertes.
Tras recordar que se ha reconocido a México desde instancias internacionales, como la Organización Mundial de la Salud, por ser una de las naciones con mayor reconversión de hospitales para atender a pacientes del coronavirus, además de ser de los primeros países en recibir y aplicar la vacuna, defendió la respuesta que ha dado la administración federal para atender la emergencia sanitaria.
“Hemos hecho todo lo que hemos podido realizar, diría que ha habido una entrega total, se ha actuado no solo como buenos servidores públicos, sino de buen corazón, con mística, para enfrentar la pandemia y evitar los fallecimientos. Hemos trabajado día y noche, y estamos hablando de muchos trabajadores de la salud”, agregó.
No obstante, dijo, sus adversarios “son capaces de valerse de todos, hasta del dolor humano, andan zopiloteando, es temporada de zopilotes”, y magnifican lo que pueda perjudique a su gobierno “porque lo que está en el fondo, no hay que olvidarlo, es que estamos combatiendo la peste de la corrupción. No sólo son los de la mafia del poder, sino sus achichincles, voceros, intelectuales orgánicos, la prensa que está mostrando el cobre”.
Esto, dijo, no se vive sólo en México, sino en el mundo, con una crisis de credibilidad en los medios de comunicación. En México, dijo, la mayoría de los medios están en poder de “hombres de negocios”, no de periodistas, y están vinculadas a empresas constructoras o proveedoras que tuvieron contratos con el gobierno federal en sexenios pasados.
Durante la conferencia, el Presidente hizo un enlace al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde con Pedro Zenteno Santaella, director general de Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex), informó que a las 6:15 de la mañana arribó al país un cargamento con 500 mil dosis de la vacuna rusa Sputnik. Con el lote de Pfizer que se recibirá esta semana, sumarán 13 millones 456 mil dosis del antígeno de distintas farmacéuticas ya recibidas.