Con una bata blanca y brazalete que los identificó como parte de la Brigada de Vacunación contra el Covid, médicos generales del 46 Batallón de Infantería de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se sumaron ayer a la aplicación del biológico AstraZeneca, que recibieron adultos de 60 años y más en la biblioteca Vasconcelos, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Esmirna Altamirano y Jesús Alberto Meza, ambos de 26 años, coincidieron en que viven “una experiencia muy bonita” al formar parte del ejército que combate la pandemia, porque no sólo es gratificante apoyar en la vacunación a los adultos, sino “el agradecimiento que tienen hacia nosotros”.
Comisionada en los hospitales Covid de la Sedena, Altamirano recordó que todos los pacientes han dejado huella en sus menos de tres décadas de vida, particularmente algunos que fueron intubados y “que perdieron la batalla”, con lo que “todos se llevan una parte de nosotros”.
Ante el relajamiento de las medidas sanitarias de algunos ciudadanos, la egresada del Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud del Instituto Politécnico Nacional, Unidad Milpa Alta, mencionó: “Nos da mucha tristeza, la verdad, que nosotros dejamos familia y todo por estar con ustedes”. Por ello, pidió a la población “que se siga cuidando”.
Por su parte, Meza, quien estudió medicina en la Universidad Anáhuac, se congratuló de apoyar al sector de la población “más vulnerable”, además de estar agradecido por “tener la oportunidad de colaborar y poner nuestro granito de arena”.
A la biblioteca Vasconcelos acudieron cientos de adultos que se aglomeraron en la explanada de la estación Buenavista y la banqueta del Eje 1 Norte, entre las 11 y las 13 horas, con lo que el tiempo total de vacunación fue de al menos dos horas, pero la mayoría de los adultos se dijeron contentos al salir inoculados, porque “todo el personal es muy amable y atento”.
Algunos se quejaron de que se formara una sola fila, por lo que no se respetó, dijeron, el horario de cita; en tanto, servidores de la nación explicaron que acudieron personas cuya primera letra del primer apellido fue diferente a A, B y C; además de la presencia de residentes del estado de México que aseguraron tener cita.
Mientras tanto, en el estadio de Ciudad Universitaria no hubo incidentes, aunque se registraron casos esporádicos de habitantes de Coyoacán que acudieron a vacunarse a las instalaciones asignadas sólo para residentes de Álvaro Obregón.