Ciudad de México. Las medidas de distanciamiento físico y el uso de cubrebocas deben continuar aun cuando se ha recibido la primera dosis de vacuna contra Covid-19, resaltó Mario Héctor Martínez Gómez, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
“La protección después de recibir la primera dosis varía del tipo de inoculación aplicada, pero oscila entre 60 y 70 por ciento, sin embargo, en México sólo se ha inmunizado a alrededor de uno por ciento de la población y aún hay muchas personas enfermas, por lo tanto, hay que continuar con las medidas” de protección, señaló.
Indicó que si bien los biológicos dan un estímulo al cuerpo para generar defensas, es en 14 días –en promedio– cuando en realidad empiezan a desarrollarse, por eso es importante que la gente que ya se vacunó siga utilizando los mecanismos de protección, “pues sigue siendo vulnerable”.
Martínez Gómez también se pronunció por que se acelere el paso en la vacunación con el fin de evitar variables como la replicación del virus que puede convertirse en “un dolor de cabeza”, además de poner atención a los menores de edad, sector que también está en riesgo.
Expuso que si bien se sabe de una buena cantidad de secuelas en pacientes adultos que padecieron Covid-19, las que puede presentar un niño de seis años podrían afectarlo el resto de su existencia con un daño a su calidad de vida.
“Con las vacunas de AstraZeneca y Moderna se está empezando a hacer estudios en niños de 6 meses a 12 años, por lo que sería bueno trabajar a marchas forzadas para encontrar mecanismos que puedan ser de utilidad”, dijo.
El investigador visitante del Departamento de Biotecnología de la Unidad Iztapalapa enfatizó que además de las inmunizaciones aprobadas internacionalmente, México está presente en el desarrollo tecnológico de algunas, incluidas ADN del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), la Universidad Autónoma de Baja California y el Instituto Politécnico Nacional (IPN); la recombinante del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México en colaboración con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN; la de Avimex-IMSS; y la basada en péptidos de la Universidad Autónoma de Querétaro en colaboración con el IPN.