Chetumal. Óscar Montes de Oca Rosales, fiscal general del estado, negó que Quintana Roo sea un estado feminicida e indicó que durante 2020 se registraron 15 feminicidios, de los cuales se detuvo a 14 personas que ya están bajo proceso y “sólo nos falta uno”. El funcionario indicó que “nada justifica que haya un solo feminicidio, pero este año en Quintana Roo hay cuatro y en otras entidades hay más”.
En entrevista dijo que en lo que va de este 2021 se registran cuatro feminicidios en Quintana Roo, y que en todos los casos hay personas detenidas y bajo proceso legal.
Dijo que de los 15 feminicidios de 2020, 14 fueron resueltos y sólo queda la detención de una persona con orden de aprehensión que se relaciona al caso de Alexis, ocurrido el 8 de noviembre en Cancún.
El funcionario respondió a las acusaciones que apuntan a la entidad como un estado feminicida y comentó que “habrá que ver la fuente y quien lo está publicando”.
Montes de Oca Rosales reiteró que se trabaja desde dos frentes para reducir la incidencia de cualquier tipo de violencia de género, que representa el segundo delito más denunciado en la entidad.
“Todos los días, en conjunto con el gobierno del estado, estamos trabajando en el tema de violencia de género, ya no estamos permitiendo que esas prácticas se lleven a cabo, esas prácticas de violencia de género, de maltrato e indiferencia, todo ese tipo de temas se trabaja a nivel prevención, pero también desde la Fiscalía, para que no haya impunidad”, mencionó.
En relación a las demandas de dilación de la justicia para atender temas de violencia de género, que mensualmente son entre 40 y 50, el funcionario explicó que recientemente se implementan modelos de gestión, por lo que se publicó el plan de ejecución penal que justamente busca abatir el rezago.
“No hemos descuidado el tema de violencia familiar, acabamos de bajar recursos federales para implementar un plan para contratar personal y asignarlo a la Fiscalía de la Mujer; acabamos de contratar 12 psicólogos más, los cuales abatieron el rezago de Cancún, pero falta abatirlo en Solidaridad y Othón P. Blanco”, precisó Montes de Oca.
Poca profesionalización policial
Luis Germán Sánchez Méndez, académico e investigador de la carrera en Seguridad Pública de la Universidad de Quintana Roo (Uqroo), dijo que en el reciente caso de abuso policial que provocó la muerte de la ciudadana salvadoreña Victoria Salazar, “se trata de profesionalizar la función policial”.
“No sólo es capacitar dos o tres veces, lo ocurrido en Tulum, que sólo conocemos porque quedó en video, se da por el desconocimiento de la función policial, urge profesionalizar”, comentó en entrevista.
El abogado y experto en seguridad pública mencionó que si bien el hecho ocurrido en Tulum la tarde del pasado sábado 27 de marzo, hay muchos otros casos que ocurren y no son públicos en la ya de por sí compleja relación con la sociedad.
“Y eso pasa porque en la función policial se debe identificar el uso de la fuerza, la autoridad puede usar la fuerza para cumplir su función, pero debe ser proporcional y cumplir condiciones, básicamente el profesionalizar las fuerzas policiales tiene que ver con cumplir con su función en todos sus actos de manera profesional”, explicó Sánchez Méndez.
Prevalecen niveles de profesionalización muy bajos y ello propicia que la función no se cumpla de manera adecuada: “Eso es no poder cumplir la función policial como lo establece la normativa, cuando se realizan actos que ponen en riesgo la integridad física de la gente”, dijo el también ex director de seguridad pública de Othón P. Blanco.
Criticó también la existencia de un Mando Único en Quintana Roo, el cual carece de figura normativa, además de que la estructura se da a partir de un solo mando que atienda todas las necesidades policiales pese a que la Constitución del estado apunta a que cada Ayuntamiento debe hacerse cargo de la seguridad pública de su demarcación.
“Si hubiera resultados óptimos, pues adelante, pero no los tiene, hay que observar desde el principio normativo que no procede, pero además operativo, que tampoco es funcional; el dejar en manos de una persona la decisión de toda la seguridad el día de hoy no es adecuado en el procedimiento operativo policial, porque las necesidades son diferentes”, dijo Sánchez Méndez.
La función policial debe hacerse profesionalmente, lo que implica mejorar los horarios, pues turnos de 24 por 24 horas no son admisibles para ningún ser humano, lo que implica la función de los policías en cuanto a un esfuerzo físico adicional, consideró el académico.