Ciudad de México. La Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México señaló que es importante se fortalezcan las estrategias para identificar, visibilizar, prevenir y atender la violencia que viven las mujeres con discapacidad, y garantizar sus derechos humanos.
La eliminación del juicio de interdicción y su sustitución por un sistema de apoyos para la toma de decisiones impulsaría la autonomía de las personas con discapacidad, que suman 589 mil 741, de las cuales 55 por ciento son mujeres.
Además se requiere identificar los impactos diferenciados que derivan de la intersección de ser mujer con discapacidad: la edad, la identidad, pertenecer a la población LGBTTTIQA+, vivir en una institución o en situación de calle, entre otras, indicó.
Una de las barreras que viven las mujeres con discapacidad es la falta de reconocimiento de su capacidad jurídica, debido a la existencia de juicios de interdicción, y, en consecuencia, obstáculos para tomar sus propias decisiones.
Ello, argumentó, deriva en la falta de acceso a la justicia; exclusión de los servicios de salud de forma informada y accesible, como es el caso de las esterilizaciones forzadas.
Señaló que también se ven afectadas por la violencia familiar, la cual corre el riesgo de aumentar su invisibilidad con las medidas de distanciamiento social durante la emergencia sanitaria por Covid-19.
Destacó que, a 14 años de la firma de la Convención Sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y la ratificación del Protocolo Facultativo, se enfrentan diversos retos para que las mujeres con discapacidad tengan una vida libre de violencia.
Ese documento propone un cambio de paradigma sobre la discapacidad, para dejar atrás el modelo médico asistencial y transitar a uno social, por lo que es necesario conocer el contexto en que viven las mujeres con discapacidad.
Así como consultarlas para implementar políticas públicas que realmente generen cambios y puedan vivir una vida libre de violencia, precisó la CDHCM.