Ciudad de Guatemala. Guatemala decretó este lunes el estado de prevención que autoriza el uso de la fuerza en su frontera con Honduras para evitar el ingreso de una nueva caravana de migrantes que saldrá desde ese país en su intento por llegar a Estados Unidos, informó el gobierno.
La caravana saldrá este martes desde el norte de Honduras, según han alertado las autoridades de Migración de Guatemala.
El decreto, firmado por el presidente Alejandro Giammattei y su gabinete, establece que "existe riesgo de desplazamiento" de migrantes en cinco departamentos fronterizos que "no cumplirían" los controles legales ni presentarán una prueba negativa de covid-19, exigidos para ingresar a Guatemala.
La caravana generará una "crisis de seguridad ciudadana" en su ingreso y desplazamiento por el país "agravando la emergencia sanitaria epidemiológica" por la pandemia del nuevo coronavirus, justificó el gobierno.
Durante el estado de prevención se podrá "disolver por la fuerza toda reunión, grupo o manifestación pública que se llevare a cabo sin la debida autorización", agregó el texto.
El estado de prevención regirá durante los próximos días en los departamentos de Izabal, Zacapa, Chiquimula, El Progreso (este) y Petén (norte), todos cercanos a la frontera con Honduras.
Alejandra Mena, vocera del Instituto Guatemalteco de Migración de Guatemala, dijo a periodistas que, aunque su contraparte en Honduras no ha confirmado el éxodo, se mantienen en monitoreo debido a que en "grupos de Facebook y WhatsApp" se alerta del "posible movimiento" para este martes.
A mediados de enero pasado, policías y soldados guatemaltecos hicieron retroceder con porras y gas lacrimógeno una caravana de cerca de 7 mil migrantes hondureños que irrumpieron en la frontera sin pasar los controles requeridos por Guatemala.
El grupo, en el que viajaban varios niños, huía de la pobreza, violencia y daños provocados por el paso de huracanes a finales de 2020 en Honduras. También marchaban esperanzados en cambios en la política migratoria de Estados Unidos con la llegada al poder de Joe Biden.
Desde octubre de 2018, la migración irregular a Estados Unidos desde Centroamérica dio un giro con la salida de caravanas de miles de personas, principalmente desde el norte de Honduras, y a las que se les han unido salvadoreños, guatemaltecos y migrantes de otros países.