Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó ayer ante la prensa que no ha conversado con sus pares Vladimir Putin, de Rusia, y Xi Jinping, de China, sobre la próxima cumbre sobre el clima, pero adelantó que ambos líderes están invitados.
“Ellos saben que están invitados, pero no he hablado todavía con ninguno de ellos”, expresó el mandatario al ser consultado respecto a si invitaría a Putin al acto organizado por Estados Unidos, que se realizará de forma virtual los días 22 y 23 de abril.
Hace 10 días Biden aseguró que concuerda con la afirmación de que su par ruso, Putin, es un “asesino”, y advirtió que “pagará las consecuencias” por presuntamente tratar de socavar su candidatura en las elecciones de 2020. Interrogado por un periodista que le preguntó si piensa que el presidente ruso “es un asesino”, el mandatario respondió: “Sí, lo pienso”.
Esta semana, el presidente estadunidense aseguró que los gobernantes de Rusia y China “no creen que la democracia pueda funcionar”.
En paralelo a las declaraciones del mandatario, la Casa Blanca publicó un comunicado en el que informó que el presidente estadunidense invitó a “40 líderes mundiales” a la cumbre del clima, incluidos Putin y Xi Jinping.
Suman 18 mil 46 niños migrantes solos en EU
Luchar contra la corrupción y la inseguridad en Centroamérica, así como promover la prosperidad, son el principal enfoque de Estados Unidos para atajar las oleadas migratorias desde la región, dieron a conocer ayer dos altos funcionarios de la administración de Joe Biden encargados de atender el problema. En este momento las autoridades estadunidenses tienen bajo su custodia a 18 mil 46 niños migrantes no acompañados por sus padres, informaron los departamentos de Salud y Servicios Humanos y de Seguridad Nacional.
Desde que llegó a la Casa Blanca en enero, Biden desmanteló varias medidas de su predecesor, Donald Trump, que frenaron la llegada de migrantes a su frontera sur. En las semanas recientes se ha producido un aumento de los intentos de alcanzar Estados Unidos de esos grupos, por lo que ahora el gobierno estadunidense ordena más deportaciones y recibe a menores de edad en improvisadas instalaciones de acogida.
“Cuestiones de gobernación y esfuerzos contra la corrupción serán centrales, tanto como (...) promover situaciones que impulsan la dignidad, la seguridad, la prosperidad de los centroamericanos en sus propios países”, afirmó Ricardo Zúñiga, enviado especial presidencial para el Triángulo Norte de Centroamérica.
Zúñiga y el director para el Hemisferio Occidental del Consejo Nacional de Seguridad, Juan González, ofrecieron una rueda de prensa virtual después de posponer un viaje que debían realizar esta semana a Guatemala para tratar esos asuntos, debido a la presencia de las cenizas del volcán Pacaya en la nación centroamericana.
“El tema de la corrupción es algo que es endémico para Centroamérica y para toda la región, y es uno de los elementos que motiva la migración”, agregó González.
Desde el Triángulo Norte, integrado por El Salvador, Guatemala y Honduras, parten cada año miles de personas con destino a Estados Unidos huyendo de la pobreza y la inseguridad, en una peligrosa travesía a través de México.
Para frenar ese fenómeno, González remarcó que Washington envía ayuda humanitaria para los miles de desplazados en Honduras y Guatemala por el paso de dos devastadores huracanes a finales de 2020, e impulsa planes de creación de empleo con socios locales.