Enrique de la Garza Toledo, miembro emérito del Sistema Nacional de Investigadores y figura fundamental en el desarrollo de los estudios del trabajo en América Latina durante las últimas décadas, falleció el jueves pasado a los 74 años.
Intelectual comprometido con la democratización y el cambio social, su obra constituye un “referente ineludible y un aporte crucial” a la investigación laboral en Latinoamérica, destacó la Universidad Diego Portales, de Chile, al externar su pesar por el fallecimiento del doctor De la Garza Toledo,
Nacido el 31 de enero de 1947 en San Buenaventura, Coahuila, Enrique de la Garza Toledo era profesor investigador de tiempo completo en la Universidad Autónoma Metropolitana. Doctor en sociología por El Colegio de México realizó postdoctorados en la Universidad de Warwick, Inglaterra, y en Berkeley, California.
Integrante del comité editorial de El Trimestre Económico, publicación del Fondo de Cultura Económica, era un especialista en sociología del trabajo, relaciones industriales, metodología de las ciencias sociales y la teoría social.
Fue fundador de la corriente de pensamiento de los nuevos estudios laborales en América Latina y también integrante de la Academia Mexicana de Ciencias. En 1982 obtuvo el Premio Nacional de Economía; en 1992 fue galardonado con el Premio anual de investigación económica Jesús Silva Herzog; y en 2009 recibió el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de historia, ciencias sociales y filosofía.
“Fue una eminencia en los estudios sobre el trabajo y comprometido siempre con las mejores causas sociales”, expresó el también economista Saúl Escobar, respecto del fallecimiento de De la Garza Toledo.