Morelia, Mich., En Michoacán las reservaciones hoteleras para Semana Santa en sitos de mayor atracción turística oscilan entre 38 y 42 por ciento, cuando en enero y febrero, de este año, no rebasaron el 26 por ciento de ocupación, informó la Asociación de Hoteles y Moteles del Estado.
Desde que inició la pandemia, 50 de 700 hoteles y moteles de Michoacán han cerrado, y la ocupación promedio en casi un año bajó de 54 a 27 por ciento, en los municipios de Morelia, Pátzcuaro, Uruapan, Lázaro Cárdenas, Zitácuaro, Zamora, entre otros.
Se espera que miles de personas de las regiones centro y poniente del estado, se trasladen a las playas del Pacífico de Lázaro Cárdenas, Aquila y Coahuayana, por lo que se prevé que los escasos hoteles rústicos que hay se ocupen al 100 por ciento, y acampen cientos de familia en más de 220 kilómetros de playa.
Los lugares más visitados serán Playa Azul, Playa Tortuga, Maruata, Pichilinguillo, Las Brisas, Caleta de Campos, Las Peñas, Faro de Bucerías, San Juan de Alima, Colola, Boca de Apiza, La Ticla, entre otras. Además de balnearios como Huandacareo, Los Azufres y los de región de Tierra Caliente.
Cabe señalar que las ceremonias religiosas, culturales de Morelia, Pátzcuaro y Uruapan han sido suspendidas. Por ejemplo, el tradicional tianguis artesanal de Uruapan que era visitado por miles de personas, con la participación de unos dos mil artesanos, y otro escaparate similar que se realizó hasta 2019 en la Plaza Vasco de Quiroga y que fue interrumpido ante la pandemia de Covid 19 que inició en esta entidad hace aproximadamente un año.
Michoacán recibió hasta 2019 aproximadamente 600 mil visitantes, de los cuales 86 por ciento eran nacionales ocho por ciento estadunidenses y seis por ciento de otros países. Habrá una disminución de al menos 40 por ciento, pero es muy probable que el turismo regional se incremente, a decir de las autoridades del sector turístico.
La Secretaría de Turismo del estado se ha reunido con prestadores de servicio para tomar las medidas preventivas básicas para trata de impedir que haya una nueva oleada de propagación del Covid-19.