El número de mexicanos con carencia alimentaria asciende a 40 millones, cifra que casi duplica a los 25 millones que había antes de la pandemia de Covid-19. En tanto, el 37 por ciento de los alimentos que se producen en el país se pierden o desperdician a lo largo de la cadena de valor, lo que equivale a 491 mil millones de pesos anuales, señaló el Banco de Alimentos de México.
En la presentación del “Pacto por la Comida”, María Teresa García Plata, directora general del organismo, indicó que el desperdicio de alimentos representa el 2.5 por ciento del Producto Interno Bruto, con afectaciones en distintos rubros.
La pérdida de alimentos tiene consecuencias en el medio ambiente, al generar 36 millones de toneladas de gases efecto invernadero, equivalente a las emisiones anuales de 15 millones de vehículos.
Además, la huella hídrica representa el consumo de 40 mil millones de metros cúbicos de agua, y 4.4 mil hectáreas de tierras de cultivo desperdiciadas, señaló García Plata de acuerdo con datos del Banco Mundial.
Expuso que el objetivo de la iniciativa, impulsada por diversas empresas, es reducir las fuentes de desperdicio de alimentos, a fin de alcanzar uno de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU.
Por su parte, Federico González Celaya, presidente de la Red Nacional de Bancos de Alimentos en México, dijo que “los impactos negativos del desperdicio de alimento son innegables y requieren de especial atención”.
Al mismo tiempo destacó que en 2020 esta organización distribuyó 174 mil toneladas de alimentos a 2 millones de personas.