Moscú. La salud del opositor Aleksei Navalny sufrió un grave deterioro desde que está recluido en una de las más severas colonias penitenciarias de la región de Vladimir.
Así lo afirmaron este jueves sus abogados, Olga Mijailova y Boris Kobtsiev, quienes aseveraron que el principal adversario del Kremlin necesita urgente atención médica que le niegan las autoridades carcelarias al sostener que “el convicto se encuentra en perfecto estado”.
El propio Navalny, a través de los abogados, denunció que tiene fuertes dolores en la espalda y que prácticamente no puede mover una pierna, por lo cual lleva semanas solicitando que autoricen que lo examine un médico de su confianza, debido a que en la colonia penitenciaria apenas le dan dos tabletas por día de un analgésico.
También hizo saber que hace días lo llevaron a un hospital de la ciudad de Vladimir, donde le hicieron una resonancia magnética, pero hasta ahora no han querido decirle los resultados de esa prueba ni le han proporcionado el tratamiento adecuado.
Además, el opositor –en sendas declaraciones dirigidas al director del reclusorio y al jefe del Servicio Federal Penitenciario de Rusia, cuyas copias entregó a los abogados– afirma que padece “una forma perversa de tortura mediante la privación del sueño”.
Afirma que se le impuso, por ahora durante un plazo de seis meses, “sin motivo alguno, el estatus de proclive a la fuga, por lo cual todas las noches, en un exceso de control cada una de las ocho horas que corresponden al sueño de los reclusos conforme al reglamento del penal”, un funcionario lo despierta con una linterna y graba un video que sirve de confirmación de que no ha intentado huir.
Navalny dio a conocer que, en ese contexto de acoso nocturno, recibió una amonestación por “levantarse diez minutos antes” de la hora establecida, lo que a su juicio parece “una cruel burla”.
Entretanto, Yulia Navalnaya exigió al presidente Vladimir Putin poner en libertad a su esposo, al cual “encerró ilegalmente porque tiene miedo a la competencia política y quiere estar sentado en el trono hasta su muerte”.
Según ella, “lo que está pasando es una venganza personal contra su marido y se le castiga sin piedad, y esto debe cesar de inmediato”.
El equipo de Navalny convocó manifestaciones en favor de la libertad del opositor, en fecha que anunciará cuando se hayan registrado al menos 500 mil personas, cantidad que aseguran que ninguna autoridad se atrevería a reprimir.
Hasta esta noche, en un sitio de Internet creado para tal propósito, cerca de 270 mil personas habían expresado su intención de participar.