Toluca, Méx., Veinticinco presuntos integrantes del grupo delictivo La familia michoacana han sido detenidos por su probable participación en el asesinato de 13 policías estatales y ministeriales emboscados el 18 de marzo en el municipio de Coatepec Harinas y a la entrada de Zacualpan, demarcación vecina, informó ayer la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).

Detalló que en el lugar de los ataques encontraron más de 670 casquillos percutidos de diferentes calibres, y con análisis periciales se comprobó que una de las armas ya había sido utilizada en otros homicidios que se han perpetrado en el sur de la entidad.

La fiscalía destacó que las indagatorias llevaron a la captura de los 25 presuntos implicados, quienes estarían a las órdenes de tres sujetos que ordenaron la matanza. Agregó que ya existe una orden de aprehensión contra esos tres individuos y se ofrece una recompensa hasta de 500 mil pesos para quien dé información que permita localizarlos.

Precisó que en la zona sur permanecen casi 500 efectivos de diversas corporaciones que colaboran en la búsqueda de los responsables de estos ataques.

Agentes y militares recorren seis municipios

Refirió que los tres sujetos que habrían ordenado los asesinatos fueron identificados como Alberto Romero Pérez, alias Macrina; Silverio Martínez Hernández, Fierros, y Gilberto Misael Ortiz Trujillo, Barbas, miembros de La familia michoacana.

En su comunicado, la FGJEM subrayó que desde el 18 de marzo policías estatales y ministeriales, efectivos de la Guardia Nacional, soldados y marinos buscan a los implicados en Ixtapan de la Sal, Tonatico, Coatepec, Almoloya de Alquisiras, Zacualpan y Sultepec.

A los 25 detenidos “se les investiga por actividades ilícitas como venta y distribución de drogas, halconeo y robos en diversas modalidades”, añadió.

Adicionalmente fueron presentadas ante el Ministerio Público de la fiscalía mexiquense ocho personas en calidad de testigos.

En las diligencias también se recuperaron cuatro armas oficiales y una larga sin identificación, las cuales estaban en poder de los agresores, expuso la fiscalía.

Indicó además que tras realizar las pruebas periciales al arma larga se determinó que previamente fue utilizada en dos homicidios, el primero, el 16 de julio de 2020, y el segundo en octubre del mismo año en Coatepec Harinas.