Los subsidios al sector privado mediante tarifas y contratos con los productores privados de energía (PIE) representarán para la Comisión Federal de Electricidad (CFE) costos por 209 mil 130 millones de pesos entre 2020 y 2024, final de la actual administración, revelan estimaciones de la empresa productiva del Estado.
Actualmente la CFE subsidia costos e inversión creciente en el sector de transmisión eléctrica. Por ello, la CFE busca renegociar las condiciones para que los PIE paguen tarifas justas de transmisión, independientemente de dónde generen la electricidad.
Los subsidios contabilizados por la CFE no son transferencias directas de recursos a los privados, sino que son costos estimados por las pérdidas por las bajas tarifas que pagan por el uso de las líneas de transmisión, señalaron analistas.
Por su parte, la compañía eléctrica explicó en un reciente informe que la reforma energética de 2013 creó un modelo de mercado simulado, donde los recursos y los mecanismos están diseñados para favorecer a grupos económicos privados, en detrimento de la CFE.
Con dicha reforma, la CFE está obligada a subsidiar a privados costos e inversión creciente en la red nacional de transmisión, así como el respaldo para las fuentes de energía intermitente.
Los subsidios de la CFE a privados incluyen: subsidio a tarifa de renovables; subsidio por inversiones crecientes en la red (la transición de cada sistema de potencia hacia mayor proporción de generación renovable depende de una planeación con criterios técnicos de confiabilidad que tiene altos y crecientes costos), y el subsidio por respaldo a la intermitencia con las plantas convencionales de CFE.
El monto total de los subsidios estimados por 209 mil millones para un quinquenio no incluye la tarifa creciente que CFE tiene que pagar por los contratos legados vigentes de venta de electricidad a CFE; el riesgo cambiario, la inflación y el costo del bajo despacho de las plantas de la eléctrica nacional.
En una presentación fechada el pasado 11 de febrero de este año, donde explica los alcances de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, suspendida temporalmente por fallos del Poder Judicial, calcula que si se incluyen todas estas variables, el costo total de los daños por los contratos a PIE entre 2020 y 2024 asciende a 412 mil 410 millones de pesos.
El gobierno federal ha reiterado la disposición para que la CFE y los productores privados se acerquen a renegociar contratos.
Puso como ejemplo una empresa que genera electricidad en Tijuana, pero tiene su fábrica en Guadalajara, establece un acuerdo con la CFE para un intercambio o swap. Así, la energía que la empresa produce en Tijuana se deja en esa entidad, pero en contraparte, la CFE entrega electricidad en Guadalajara, explicó Ramses Pech, especialista en materia energética.
Pero la CFE quiere modificar las condiciones inequitativas, porque la electricidad de Tijuana a Guadalajara tiene un costo, y si en Guadalajara no se tiene el flujo suficiente para cubrir la demanda, la tienen que mandar desde Chiapas con la generación de las hidroeléctricas y el consecuente costo.
“La CFE ya no quiere continuar con ese trato inequitativo. El privado sigue generando, pero si la tiene que mandar a otros puntos de la República, la CFE va a cobrar por la utilización de la red.”