Tlalnepantla, Méx. Dirigentes obreros instaron al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la apertura de clínicas regionales para la recuperación multifactorial de los trabajadores con síndrome post-Covid-19, pues aseguran es necesario atender los daños colaterales en su estado de ánimo y rendimiento laboral.
“Pérdida de parte de la capacidad respiratoria, esquizofrenia, insomnio, depresiones, dolor de cabeza, hasta problemas muy graves, como es el alza de la tasa de hipertensos, diabéticos y alteraciones metabólicas endógenas”, son algunas de las consecuencias después de haber padecido la enfermedad, enlistó el doctor, Jorge Díaz Galindo, oficial mayor de la Confederación de Trabajadores de México en el estado.
El médico planteó que al corte del domingo, tan sólo en la entidad, unas 153 mil 847 personas superaron el coronavirus y estudios científicos advierten que al menos 80 por ciento de estos enfrentan alguna de las 50 secuelas post-covid-19.
En conferencia de prensa organizada de manera virtual por el Consejo Coordinador Empresarial para abordar la problemática de ventas de la industria automotriz, Díaz Galindo manifestó que urge una política nacional y de los estados de atención a dicho síndrome.
Destacó que cuando un empleado u obrero que superó el contagio “asiste con su médico familiar, desgraciadamente le comentan que son sus nervios, que regrese a laborar y piensan que está buscando una incapacidad”.
Añadió que en una reciente reunión de hoteleros, éstos plantearon que sus empleados que fueron infectados por el virus y se recuperaron presentan problemas de agotamiento, ya no pueden subir escaleras, ni realizan las mismas actividades físicas que demandan una sobre saturación energética y corporal.
“Esto está lesionando aparte de la salud del trabajador, su ánimo, su disposición e igualmente ya estamos viendo como la productividad comienza a bajar”, dijo Díaz Galindo.
“Por ello estamos demandando al IMSS la instalación de clínicas de recuperación pero multifactoriales, pues actualmente solamente hay para atender problemas respiratorios y no, necesitamos que haya endocrinólogos, ortopedistas, siquiatras, de terapia física, personal con tratamiento integral, como ya lo están haciendo otros países como Estados Unidos y de América Latina”, argumentó.