La reunión de alto nivel que se efectuará hoy entre representantes de los gobiernos de México y de Estados Unidos para abordar la crisis migratoria fue solicitada por la parte mexicana, señalaron funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Ante el desborde de los flujos migratorios procedentes de Centroamérica, las autoridades mexicanas convinieron la necesidad de acelerar la atención al fenómeno coordinadamente con el gobierno de Joe Biden, por lo que convocaron al equipo estadunidense en la materia para comenzar a valorar opciones de apoyo para la región.
Las fuentes consultadas detallaron a La Jornada que la delegación mexicana, que será encabezada por el canciller Marcelo Ebrard, presentará a la estadunidense el Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica anunciado en 2019 como una medida del presidente Andrés Manuel López Obrador para apoyar a esas naciones a atacar las causas de la migración irregular.
Con ese proyecto, la administración federal destina 31 millones de dólares a El Salvador y Honduras –el convenio con Guatemala está pendiente debido a la pandemia de Covid-19– para implementar en esas naciones dos de los programas centrales del gobierno de López Obrador: Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro.
La delegación estadunidense, encabezada por la encargada especial de la administración de Biden para la frontera sur, Roberta Jacobson, será recibida este martes en la sede de la SRE.
Los funcionarios de la cancillería agregaron que ambos gobiernos comparten una visión que reconoce la dignidad de los migrantes, la necesidad de generar una movilidad ordenada, segura y regular, así como el compromiso de enfrentar las raíces de la migración irregular. Recordaron que el presidente estadunidense informó en su primera llamada telefónica con su par mexicano que destinaría 4 mil millones de dólares a Centroamérica para frenar la migración forzada.
Agregaron que también se dialogará sobre los avances para dar por concluido el programa Quédate en México.
Sobre el encuentro, el director general para América del Norte de la cancillería, Roberto Velasco Álvarez, indicó que el principal tema a tratar “será la cooperación para el desarrollo en Centroamérica y el sur de México, además de los esfuerzos conjuntos por una migración segura, ordenada y regular”.
Esta reunión se da en medio de una crisis migratoria que afrontan ambos países, donde los flujos de personas en movilidad irregular se han incrementado a raíz del comienzo de la administración de Biden, quien ha enarbolado un discurso en materia migratoria menos agresivo al de su antecesor, Donald Trump.
Cifras oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) señalan que en febrero de este año 100 mil 441 migrantes fueron detenidos en su intento por entrar a ese país, 22 mil más que los 78 mil 442 aprehendidos un mes antes. De acuerdo con las estimaciones de la CBP, para marzo la cifra podría alcanzar 120 mil personas en esta situación.
En tanto, en México, en enero de 2021 fueron presentadas ante la autoridad migratoria 9 mil 574 personas que se internaron de manera irregular, un incremento de 41 por ciento respecto a los 6 mil 337 registrados en diciembre del año pasado.
Este intercambio entre funcionarios de los dos países también se da a unos días que México decidió extender sus medidas de restricción al tránsito terrestre no esencial en su frontera sur, con el argumento de prevenir la propagación del Covid-19.