Es muy probable que la alcaldía Cuauhtémoc no se convierta en la arena de lucha donde se decida el futuro político de la ciudad, pero sí será un punto de mayor importancia para considerar los horizontes de actuación, cuando menos, de la tribu que encabeza Ricardo Monreal.
Después de su sonora derrota en las listas de candidatos a las alcaldías, donde no logró ningún puesto desde Morena, ha metido en la contienda a Sandra Cuevas desde la formación Va por México, que respaldan PRI-PAN-PRD, en un acuerdo que niega la huella de Monreal, pero que, como se sabe, no es más que otras de las argucias que el senador acostumbra.
Sandra Cuevas, militante no hace mucho tiempo del PRD, gente muy cercana al zacatecano, dice ahora no tener mayor relación con quien fuera su “orgullo”, aunque todo el mundo tiene claro que su candidatura fue un acuerdo de Monreal con los partidos que ahora la postulan.
Apenas el 22 de diciembre de 2020, la hoy candidata decía: “Me siento muy orgullosa de formar parte del equipo del doctor Ricardo Monreal, quien además de ser un gran jefe, su calidad humana es inconmensurable”.
Poco después, la mujer, en un recorrido por la colonia Maza, en Cuauhtémoc, lucía una camiseta que la identificaba como militante de Fuerza por México, partido cuyo dueño es Pedro Haces, y hay quien asegura que el ex panista Manuel Espino también le otorgó su confianza y apoyo.
Y después del periplo, para que nadie pueda dudar de su solidez ideológica, aparece como la carta del menjurje de partidos políticamente muertos que buscan renacer, entre otras formas, con la inserción de caras nuevas en sus listas, cosa que no hubiera estado mal en otros tiempos, hoy ya es muy tarde.
Pero hay algo más en juego: según las cuentas de quienes observan esta carrera electoral, la postulación de Cuevas podría ser el único, el último aliento político de Monreal en la ciudad. Si la candidata pierde, Monreal se quedará sin fichas para el tablero de la capital del país y su salida de escape, el gobierno de la ciudad, se habrá esfumado, afortunadamente.
No obstante, para quienes conocen a Monreal, el asunto no se acaba con la candidata de las mil gorras porque si en algunas alcaldías son electos algunos miembros de la hoy oposición, el zacatecano estará listo a establecer las alianzas necesarias para mantener abierta lo que hemos llamado “puerta de escape” para él, y que consiste en tener algún clavo –aunque esté ardiente– para levantarse como candidato de quien sea. Así que no queda más que decir: suerte, senador.
De pasadita
La escena transcurre en Banorte. Un cliente con los documentos que lo amparan como miembro –si así se dice– de la Afore es recibido en un módulo de las oficinas que se ubican en Periférico Sur. Su presencia se ajustaba a un reclamo por el desajuste en su cuenta.
La ejecutiva Ivonne Márquez Trinidad, de la Afore XXI, del mismo Banorte, no supo explicar con sencillez por qué los ahorros de quien estaba frente a ella habían disminuido sensiblemente.
Con cierto dejo de fastidio la mujer explicó que los dineros de la cuenta se perdieron por culpa del gobierno de Andrés Manuel López Obrador: “Ya ve lo que sucede en este gobierno, es su culpa”.
La respuesta no se hizo esperar y desde el otro lado del escritorio se pidieron explicaciones precisas de la acusación porque se trataba de los ahorros para el retiro del afectado.
Ya no hubo respuesta. La funcionaria del banco no pudo explicar que los ahorros de la gente metidos en la bolsa de valores por una ley que no promulgó este gobierno, es un capital de riesgo, y que esta vez al trabajador le tocó perder.
Final
Todo parece indicar que las autoridades electorales analizan frenar la candidatura de Víctor Hugo Romo para relegirse como alcalde de Miguel Hidalgo. Se filtró que el Instituto Nacional Electoral va a discutir un proyecto que impide su participación en los comicios por inconsistencias en la fiscalización de su precampaña.