Niamey. Unas 200 personas murieron en los últimos seis días en supuestos ataques yihadistas en el oeste de Níger, más de la mitad el domingo en la región de Tahoua, según los balances aportados por fuentes oficiales.
Los ataques perpetrados el domingo por hombres armados contra pueblos de la región de Tahoua, en Níger, "provocaron la muerte de 137 personas", anunció el lunes por la noche el gobierno nigerino.
"Al atacar sistemáticamente a los civiles, estos bandidos armados están llevando su horror y su barbarie un paso más allá", denunció el vocero del gobierno, Zakaria Abdourahmane, en un comunicado leído en la televisión pública.
El anterior balance de muertos el domingo era de 60, según las autoridades.
El ataque del domingo siguió a otros cometidos en varias localidades de la región de Tillabéri el 15 de marzo, que causaron la muerte de 66 civiles, según un balance del ministro de Interior, Alkache Alhada.
Este aumento en las agresiones supone un gran desafío para el nuevo jefe del Estado, Mohamed Bazoum, que sucederá a Mahamadou Issoufou después de que su victoria en las elecciones de febrero fuera confirmada el domingo por el Tribunal Constitucional de Níger.
El domingo, hombres armados que se desplazaban en moto "dispararon a todo lo que se movía" en los pueblos de "Intazayene, Bakorat y Wistane", además de en "campamentos circundantes" de la región de Tahoua, declaró a la Afp un funcionario local.
La región de Tahoua es vecina de la de Tillabéri y ambas están cerca de la frontera con Malí.
La región de Tillabéri está situada en la zona denominada "de las tres fronteras", en los confines de Níger, Malí y Burkina Faso, golpeada regularmente por los grupos yihadistas afiliados a Al Qaida y al Estado Islámico (EI).
El 15 de marzo, presuntos yihadistas perpetraron varios ataques contra vehículos que regresaban del gran mercado semanal de Banibangou. También atacaron la aldea de Darey-Daye, matando a sus habitantes e incendiando vehículos y graneros. En total se registraron 66 muertes.
El mismo día, un ataque reivindicado por el grupo EI contra el ejército maliense en esa "zona de las tres fronteras" dejó 33 soldados muertos.
Hasta ahora, la región de Tillabéri ha sido escenario de los ataques más sangrientos .
El 2 de enero, 100 personas murieron en ataques en la zona de Ouallam, Tillabéri, por hombres armados que también llegaron en motocicleta.